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Sinopsis de LA VOZ DEL VIOLIN
El comisario Salvo Montalbano y su peculiar universo imaginario de Vigàta, en Sicilia, ya no son unos desconocidos en nuestro país. Un mes con Montalbano y El perro de terracota bastaron para que este singular personaje se ganara innumerables adeptos. Esta novela, perteneciente a la serie de Montalbano, refuerza aún más ante sus lectores la personalidad del escéptico, irónico y en ocasiones melancólico inspector de policía. La aparente paz siciliana se ve truncada por el asesinato de una extraña. Una joven hermosa, mujer de un médico boloñés, aparece muerta en el chalet de ambos. Pocas pertenencias la acompañaban en la escena del crimen, aparte de un misterioso violín guardado en su estuche. Su bolsa de joyas se ha esfumado y todas las miradas se centran en un pariente desequilibrado que ha desaparecido la misma noche del crimen. Montalbano, con su parsimonia habitual, inicia la investigación. No cree a nadie, no se fía de nadie. Tras la muerte de un sospechoso, sus superiores dan por cerrado el caso, pero él, ni hablar. Transitando los límites de la legalidad, como es su costumbre, Montalbano ha de relacionarse y pactar con los elementos más indeseables y abyectos del hampa, iniciando un viaje a lo más oscuro del alma humana, en el fondo, su territorio predilecto.
4 reseñas sobre el libro LA VOZ DEL VIOLIN
Un nuevo caso de Montalbano que te engancha y no te suelta desde la primera página hasta la última. Este caso es complicado y el comisario, "il dottore" le llaman sus subordinados, irá tirando de los hilos de la investigación hasta aclararlo todo. En este caso ya adivinaba yo por donde iban los tiros y acerté con mi suposición de quién podría ser el/la asesino/a, pero no tenía ni idea del móvil hasta que Montalbano me lo descubrió. El comisario a veces se salta un poco la legalidad para llegar a la verdad, pero sin perjudicar a nadie. Tiene su carácter y nos lo deja ver de cuando en cuando, también en algunas ocasiones falta a la verdad en algún interrogatorio para poner al testigo o sospechoso contra la pared y hacerle hablar. Se vale a veces de los periodistas locales y los medios de comunicación para que le ayuden en sus investigaciones... Todo esto hace más interesante la lectura y la resolución de los casos. Si quieres conocer a este famoso personaje literario que vive y trabaja en un pueblo ficticio llamado Vigáta, en la isla de Sicilia, puedes leer sus novelas y pasarás unos buenos ratos con sus aventuras y descubriendo con él a los "malos". Unas lecturas altamente recomendables. 22 de agosto de 2021
Ingenioso, entretenido, con leves pinceladas humorísticas, lectura ligera sin estridencia, chispeante y perspicaz. Nada más ni nada menos. Muy en la línea de Camilleri.
Cuarta novela de la serie del comisario Montalbano. Por una casualidad en uno de los traslados del comisario sufre un accidente chocando con un coche aparcado, ante las prisas deja una nota y al día siguiente extrañado por la falta de noticias decide ir hasta el lugar, encontrando el cadáver de una mujer desnuda, comenzado así una complicada investigación que se vuelve aún más, debido a la tormentosa relación entre Salvo y Livia embarcados en la adopción del pequeño François. De momento pararé aquí, no es que la calidad haya bajado, más bien al contrario me sigue encantando pero prefiero ir poco a poco y no saturarme aunque no creo que tarde mucho en volver, el comisario Montalbano se ha convertido en un referente como en su época pudo ser Sherlock Holmes, aunque más humanizado, posiblemente ahí radique su encanto.
Me ha parecido menos interesante que otras novelas de Camilleri y su atípico comisario Montalbano. En ocasiones, la trama resulta algo forzada, aunque los métodos parsimoniosos y poco convencionales del comisario nos acaben seduciendo en la mayoría de los casos.
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FRASES DEL LIBRO LA VOZ DEL VIOLIN
"La cama es buena cosa, pues si uno no duerme, reposa", decía un proverbio local, pero era un proverbio equivocado porque el comisario en la cama no sólo había dormido a ratos sino que, además, se había levantado como si hubiera corrido una maratón.
