LA VERDAD SOBRE EL CASO DEL SEÑOR VALDEMAR

No esperes un susto de muerte, un escalofrío de terror o un patatús pero sí una hipnosis calculada y cómplice porque esto es con lo que nos quiere estremecer Edgar Allan Poe ; con hipnotismo, muerte y una tensión creciente que, mejor que al final del libro no te pille con un yogurt o con una perrunilla en la boca. Intentando no hacer spoiler sólo diré que es un relato muy breve, de una sentada está listo y aquí Poe condensa 7 meses de la "no-vida" de un enfermo terminal en 20 minutos de lectura que te envuelven totalmente en un ambiente opresivo y oscuro. Terminando , cuentan por ahí que para leer a Poe en español las mejores traducciones son las de Julio Cortázar, es la que tengo. Lo que me alegré al saberlo.

Éste es un relato, que si bien no me ha parecido de los más agobiantes y espeluznantes de Poe, tiene un toque que hace que se me pongan los pelos de punta. En éste caso, Poe incluye el mesmerismo, el magnetismo, la hipnosis, el sufrimiento, la muerte y la vida en pocas páginas. Trata con su habitual pluma descriptiva, la tortura y el horror a los que se ve sometido el señor Valdemar, tras haber aceptado participar en un experimento de hipnosis in articulo mortis, moribundo debido a la tuberculosis. El autor describe con gran exactitud, cómo la tuberculosis afecta al estado de Valdemar. Esto se debe a que en el momento en el que fue escrito el cuento, la esposa de Poe padecía de la misma enfermedad, y la muerte ya la había señalado con el dedo. No me baso en nada para decir esto, pero lo que puedo llegar a suponer es que el relato fue inspirado debido a ése acontecimiento, y en lo que a mí respecta, los cuentos de terror con una base real o algún fundamento, tienen un extra que los hacen más intrigantes. Poe nos narra el proceso de la hipnosis del señor Valdemar, las consecuencias que llega a contraer y su grotesco desenlace. La muerte… es inexorable. No hay que hacer que el cauce del río natural desborde por los laterales, pues eso tan sólo trae fatales resultados. Tratar de evitar lo inevitable, o al menos, alterarlo, es inútil… el destino siempre cumple su objetivo, sea de una manera u otra... 13/09/2021

Horrorífico, te pone los pelos de punta, un relato sobre traer de nuevo a la vida a un hombre, cuya voluntad es someterse a un estado de hipnotismo. Una vez más Poe logra estremecerme.

Excelente relato de Poe... una descripción del proceso de retardo de las consecuencias de la muerte...

Otro relato corto sobre la muerte, tema recurrente y cansino en los relatos de Poe. Narración impecable, como siempre, pero un final que desmerece...... como siempre. Relato muy relacionado a Revelación mesmérica.

Una buena historia corta llena de misterio!

7 meses en un estado catatónico, solamente interrumpido por las preguntas de P. Que lleva a Valdemar a este transe? Porque no puede terminar de morir, si es que ya no lo está? Edgar Poe no lleva en este relato a uno de sus mayores miedos, despertar y que lo crean muerto.

Otra vez Poe, esto podría confirmar mi hipótesis de que no es un imaginado sino que siempre estaba en el lugar y hora donde sucedían los hechos. ¿Será acaso ese el motivo (el ver cosas) por el cual se dedicó al no tan fructífero deporte de empinar el codo y que fuera una de las causas de su muerte? Claro está que hay un poco de exageración en los términos del mesmerismo que aunque Poe lo narra como propio, intuyo que solo lo conocía por terceros. Una prosa clara, con una ligera elevación en la trama, sin tanto revuelo en los protagonistas. Tampoco no había antagonista... Salvo que se le pueda achacar de esto a la misma muerte, (aunque esta, un poco descolorida en su tono habitual). El final magistral de montaña rusa en dónde el climax fungió de resolución. Relato cortó muy entretenido. Disfruten la lectura!