Un mundo todavía virgen, lleno de leones feroces y enormes elefantes, donde la única ley era el certero disparo de un gran cazador, y entre los grandes cazadores, el gran Allan, Macumazahn, "el que vigila en la noche", como lo bautizaron los cafres. Y como figura poderosa y sorprendente, Maiwa, una amazona en busca de sangre, una madre que busca vengar la muerte de su hijo y desata lo que se conoció como "la Guerra de la Pequeña Mano".