LA SEÑORA MC GINTY HA MUERTO

El superintendente Spence solicita la ayuda de Hércules Poirot en el caso de asesinato de la señora Mc Ginty, ya que ha sido culpado un hombre que él considera es inocente, así que Poirot hace todas las investigaciones necesarias con su habitual perspicacia. Y como siempre la novela hace una red de confusiones entre todos los personajes haciéndolos parecer culpables a todos, incluso de un segundo crimen, puesto que la segunda víctima, sabe demasiado. Existen cuatro fotografías del pasado que también implican en forma indirecta a los hijos de las mujeres de dichas fotos, a pesar de que han pasado muchos años y han radicado en países lejanos. Una buena novela, muy característica de la habilidad de esta gran escritora.

Buena novela que a veces flojea en algún momento que se hace soporífera