LA PESTE ESCARLATA

LA PESTE ESCARLATA Luego de 60 años que han pasado, justo viviendo en el 2072, la tierra ha sufrido una devastación, cuasi exterminación de la raza humana, debido a una enfermedad rápidamente contagiosa donde pocos han quedado y se ha tenido que reformar la civilización con el puñado de sobrevivientes. Pues esta obra literaria que nunca pasará de moda, tanto por la imaginación del autor como por el conjunto de sucesos acontecidos, y catalogada como ciencia ficción, logra transportarnos a un mundo primitivo, salvaje y hasta canibalesco, sin ningún espacio para momentos románticos ni finales felices. Destaca la pluma de Jack London en una obra llena de desolación y abandono, donde la imaginación se apega a un mundo roto, al retorno prehistórico. Y es que la “Peste Escarlata” una vez infecta al huésped no hay forma de dejarlo con vida, y la única forma de sobrevivir a la misma es la reclusión, cuarentena extrema. Todo tipo de especialistas en medicina intentaron buscar la cura a esta letal infección que comenzaba con mostrar la cara tan roja como un tomate, luego una convulsión hasta paralizar todas las funciones vitales y quedar totalmente inerte. “La raza humana está condenada a hundirse cada vez más en la noche primitiva”, parte de la historia de vida del abuelo Smith antes de la epidemia, quien cuenta a sus tres nietos, cuando fue profesor universitario, y fue testigo de los horrores y la violencia durante la caída de la civilización. Y es que realmente haciendo un análisis de lo que todos hemos vivido en la pandemia actual, cada cierto tiempo la vida misma nos forza, nos obliga a volver a nuestros orígenes, tal y como lo explica esta historia. De este relato se han derivado muchas otras historias, películas, series de tv y es que el argumento tiene mucho peso. Al ser un cuento corto, de fácil apego y lectura, lo recomiendo para todo público.

"Siempre serán mejores otros tiempos" ... nos recordamos con nostalgia, aquellos días donde estábamos bien y no éramos conscientes de todo lo que teníamos a nuestro alrededor. Donde hasta el más mínimo elemento en esta tierra tenía una relevancia, que posteriormente añoraríamos en un mundo desolado en nuestra cabeza y/o en nuestra física realidad. En esta historia London nos muestra cómo en un planeta tierra del año 2072, muy similar a los comienzos de nuestro origen, donde el mundo era tan "ancho" para los poquísimos humanos que habían, ahora sobrevivientes a la "Peste escarlata" y unos cuantos descendientes, se ven enfrentados a una vida precaria, sin las comodidades y facilidades que se pudo haber tenido en el año 2012, donde el hombre se ve expuesto a la necesidad de subsistir mediante la caza y la pesca. Tal fue la magnitud de esta peste, tan devastadora que producía decesos en pocos minutos, y descomponía los cuerpos en breve tiempo lo cual generó aún más su propagación, que obligó a un retroceso de millones de años en la condición humana. Me gustó mucho la forma en que se nos relata la historia, a través de la experiencia de un abuelo testigo de lo que casi fue el exterminio de la raza humana, detallándonos lo que fueron los síntomas de tan mortal enfermedad, y cuyas historias en relación a la forma de vida de nuestros tiempos, resultaban inverosímiles a los oídos de sus tres pequeños nietos. Lectura muy recomendada, sobre todo para quienes gustan de la ciencia ficción.

Desde la perspectiva de los extremos de la vida, se refiere la paradoja de la existencia del hombre . Los niños, que dentro de su desconocimiento solo pretenden el paso del tiempo y obtener alguna forma de diversión/ distracción, y una proyección a futuro que los libere de sus responsabilidades. El anciano, que despojado de sus particularidades que le otorgaban cierto conocimiento y le daba cierto reconocimiento no puede sino añorar todo lo que ahora se ha ido. y en el medio, la pérdida de toda la humanidad, generada por una epidemia veloz y devastadora, que regresa al hombre a sus más primitivas acciones, descubriendo sus más inhumanas actitudes. Siendo a su decir el único superviviente de “ la peste escarlata “ cuenta a los niños lo acontecido 60 años atrás, responsable, a su decir del desfasamiento generacional, advirtiendo, que al final se retornara a las formas ancestrales, de manera cíclica y sin haber entendido que debería haber un aprendizaje. Del cual solo quedan una moneda y un puñado de libros, que no sirven cuando la naturaleza los ha privado de todo valor.

La historia se situa en 2073 donde un superviviente de una pandemia mundial cuenta a sus nietos su lucha, 60 años antes, por la supervivencia en un mundo en el que la casi toda la población mundial ha sucumbido a la peste . Editado en 1912, parece algo premonitorio de lo que vino y vendrá. Me imagino que libros, peliculas y series actuales han sido influenciados por esta obra. Se lee rápido y el ritmo no decae en ningun momento. Corto, sencilllo y al pie.

Di con este pequeño librito justo a comienzos de la cuarentena sin saber de que se trataba. Creo que eso le dio el plus. El progresivo resurgir de la civilización luego de una devastación provocada por una peste muy extraña. Creo que lo más interesante tiene que ver con la adaptación de lenguajes, como explicar a otra generación algo que no vivieron en términos que no conocen. No soy muy amante de lo distópico, pero me resultó muy ameno y ligero, muy recomendado como lecturas para chicos y adolescentes que se quieren adentrar en la lectura. ✨

Una gran peste asola la civilización a principios de nuestro siglo. El protagonista es el último superviviente que recuerda la civilización. El hombre que calcula que en todo el planeta pueden quedar (con suerte) 400 personas, intenta que sus nietos no se transformen en salvajes y que aprendan gracias a sus conocimientos y experiencias. El libro me ha gustado, pero he de reconocer que durante casi el primer tercio del relato me daban ganas de atizarles a los nietos del protagonista. Pese a ese detalle, me gustó bastante. Puedes leerlo o escucharlo gratis en "El libro total".

En el año 2013 una extraña enfermedad se extendió por el mundo causando desconcierto y muerte a su paso. Sin tiempo para encontrar una cura, las ciudades se fueron vaciando en un éxodo desesperado en busca de huir de la catástrofe, y a su paso se cernía el caos y la violencia sin control. Han pasado sesenta años desde entonces y uno de los pocos supervivientes de la peste escarlata revive los últimos días de una sociedad que ya no existe y de un mundo olvidado, en un relato que busca ser una narración histórica y también una enseñanza para los jóvenes de un nuevo mundo en estado semi salvaje. Jack London escribió «La peste escarlata» en 1912, cien años antes de la época en que ambienta la tragedia que merma significativamente a la sociedad. Con ella inauguró un nuevo género, el de «novela catástrofe». Fue lo bastante visionario para imaginar un mundo avanzado y lleno de comodidades, pero acertó en no arriesgarse con algunos temas que, quizás, por la distancia temporal, hubiesen quedado obsoletos. El gran acierto de su novela es la narración de las reacciones y acciones humanas en medio del miedo a la muerte, y el fin de todo lo conocido. También lo es la imaginería que emplea al describir el nuevo mundo de un siglo XXI que va llegando a su fin y en el que las grandes ciudades y todos los avances del hombre han sido arrasados por una naturaleza que reclamó su lugar. Animales y hombres conviven en estado salvaje, e incluso el idioma tal cual lo conocemos ha dejado de existir. La breve novela es un cuadro tríptico en el que observamos a través de los ojos de un anciano la caída de la humanidad y su resurgir, su retorno a un pasado arcaico. Esta edición de Libros del Zorro Rojo cuenta con las ilustraciones del artista argentino Luis Scafati.

El relato se desarrolla en el 2072, luego de que una pandemia mortal asolara a la humanidad en el 2010. Un anciano superviviente hace el recuento de los inicios de la enfermedad, la decadencia de la sociedad y la extinción de la civilización, con algunas reflexiones finales sobre la naturaleza humana. Este ensayo de la distopía queda muy atrás de otras obras de Jack London.