“La mujer en la arena” es una obra de un fluir imparable y poderoso, el de la arena que avanza metro a metro para absorber las cosas y los seres, envolviéndolos en un manto de olvido. Kôbô Abe nos plantea de forma intensa y precisa (...) un mundo en el que no existe más realidad que la materia, que sólo se puede aprehender a través de una exacerbada sensualidad.