LA MUERTE DE UN VIAJANTE

Esta es una historia de la tragedia del hombre común. Nuestro protagonista es Willy Loman, un vendedor que ha dedicado su vida al trabajo y a mantener a su familia. Él ganaba bien, era muy conocido en su trabajo, tenía una esposa amorosa y sus hijos lo veían como un héroe. La vida le sonreía, pero ésta también se cansa de ser generosa. Con el paso del tiempo, Willy se da cuenta que, si bien había sacrificado mucho por su trabajo, él no era tan indispensable como lo pensaba; sus hijos crecen y ahora ven los numerosos defectos de su padre; su esposa sabe que no hay mucha esperanza para Willy, pero lo sigue apoyando en lo que puede. Willy está aferrado a la idea de que en cualquier momento todo va a cambiar a como era antes, que de pronto todo va a mejorar, pero sigue repitiendo el mismo patrón que lo llevó a lo que es ahora. Me deja con una sensación de tristeza saber que en el mundo existen miles de Willy Loman, personas dedicadas a mejorar su vida, pero al mismo tiempo sin intentarlo realmente. Están cegados en su fantasía, creyendo que "si te esfuerzas, lograrás lo que quieres" pero ¿hasta que punto es eso cierto? Si no te arriesgas no lo sabrás pero... ¿qué pasa cuando se lleva toda la vida "intentando"? Para empezar, ¿realmente lo están intentando o sólo se quedan en lo conocen y les funcionó alguna vez? Esta obra me ha dado mucho en qué pensar, una como lector puede ver varios errores que llevaron a Willy a terminar como lo hizo, aunque para él no fueron evidentes. Tal vez tengamos que ver de la misma manera hacia nuestras vidas si queremos evitar quedar estancados; vernos en modo lector. Una lectura rápida pero amarga.

Tiene una narrativa clasica. Es una lectura fluida, con unos personajes intrépidos y un viajante que sin duda te dejará sin palabras. Hace un giro de la trama muy buena. Y se lee de una sola sentada. Muy bueno y recomendado.

La primera obra de Arthur Miller que leo y de por sí ya es bastante destructiva y crítica con el estilo de vida moderna que lleva el mundo. La tragedia de La Muerte de un Viajante es profundamente trágica e impactante, no porque actúe un oráculo maligno, o una conspiración contra la realeza, sino porque es impulsada por agentes totalmente externos a nuestro control: el capitalismo. Un sistema que silenciosamente le hemos establecido un completo control sobre nosotros, tal vez de forma irreversible. La tragedia del viajante es confiar en que él significa algo en estas nuevas dinámicas del mundo. Es creer que él por su simpatía, su fidelidad, su carisma, es irremplazable e intocable. Pero esa ilusión cae, ese sueño se desvanece junto con su vida. Es el final más trágico de una vida: haber dado todo en algo, y no recibir nada de vuelta; quedar a la deriva, tirado en un bote de basura. Y esta ilusión de significancia e importancia también afecta a sus dos hijos, sobre todo a Biff, un joven que aun no siente que se haya encontrado a sí mismo. Pero eso no es válido en este sistema, y Willy, el viajante, lo sabe. De ahí todo el odio, de ahí toda la decepción. Un padre, nublado por una ensoñación (literalmente) que lo aísla completamente de sus hijos. Willy pasa por ese momento en que chocan la concepción que él tiene de sus hijos (forjados a su manera) y lo que son en realidad, ellos mismos.