LA MEMORIA DE SHAKESPEARE

Tenía una deuda pendiente con este autor y por fin me la he cobrado. Soy muy consciente de que Borges (que no ha ganado ningún Nobel, por cierto) tiene gran cantidad de Hooligans esparcidos por todos los rincones del planeta. Digo bien, pues muchos de sus adeptos seguidores, se comportan como hinchas descerebrados cuando los comentarios de sus obras, no le rinden pleitesía ni adoración. Me da lo mismo. Mi espalda es ancha y aceitada. Dicho esto: La memoria de Shakespeare es una obra compuesta por cuatro pequeños relatos que sinceramente, tampoco son para tanto. Si bien es cierto que la prosa del autor no es buena, sino sublime, el resto es del montón. De hecho, pienso que si a Borges se le considera un genio por esto, ¡Márquez es Dios! El argentino tiene un manejo del lenguaje rico y bien escogido donde no hay palabras de más excepto en las abundantes citas y referencias, que no siempre son necesarias y que en ocasiones cruzan la delgada línea entre la inteligencia y la pedantería. (hiperventilen) Además del cuento que da título a la colección y que ahonda en los desiertos de la pérdida de memoria, la antología se completa con otros tres breves textos. 25 de agosto de 1983 es quizá, el único relato que me ha convencido al cien por cien. Jorge Luis, como protagonista, se desdobla a sí mismo para anunciarse su propio suicidio. Magnífico. En tigres azules, el protagonista se balancea entre la cordura y lo demencial en busca de una obsesión. Aunque la narración es buena y reconozco su intención de crear cierta bruma en el lector, está se me antojó demasiado densa. Por último, La rosa de Parecesio es una pequeña metáfora entre la fe e incredulidad de un discípulo hacia su maestro. Si bien nada le sobra, quizá si le falte una segunda escena. Me quedé con ganas de más. En esta primera aproximación a Borges si debo destacar lo que todos sabemos. Su prosa es magistral. Aquellos que disfrutamos del arte de la palabra en forma y lugar correctos tendremos esa sensación de estómago saciado. Por no hablar de una prodigiosa inteligencia puesta al servicio de la literatura aunque no siempre bien dosificada. En definitiva, una pequeña muestra, que si algo logra es acrecentar mi interés sobre un autor del que, por otro lado, esperaba más.

Libro de cuatro cuentos de Borges. Su último libro. Pareciera que se despidió dejando lo mejor para el final. El cuento que le da nombre al libro es una obra maestra. Es increíble la genialidad de la ocurrencia. Lo leí y lo releí varias veces. Un placer.

Es el libro de cuentos más corto que he leído de JLB, y no por eso le puede adjudicar menos mérito. Si en el forjado pensamiento del autor, como es la representación del sueño de un pasado con un presente, y el declive de la memoria; Se reflejan con una síntesis perfeccionista plasmada en cuatro cuentos, estos escritos con un propósito de abarcar en manera de extracto el pensamiento borgiano, dicho esto los pensamientos quedan acoplados en la memoria del lector de una manera más inteligible... Brevísima historia del pensador, queda como un inmortal.

Borges era un escritor económico, fuera de las colaboraciones, lo más largo que escribió tiene unas once páginas. Este libro -el último de cuentos que publicó- contiene "La rosa de Paracelso", un cuento de dos páginas con la densidad de un agujero negro. Paracelso es sometido a a la prueba que Dios tiene preparada a todos, que superaron Socrates y Cristo pero no Adán. 20 siglos de teología y filosofía occidental se apilan, desde Platón a Spinoza. Un ejemplo: -"...Paracelso pidió a su Dios, a su indeterminado Dios, a cualquier Dios, que le enviara un discípulo"-, Acaso involuntariamente, lo más intenso es lo humano. "Una reina, en la hora de su muerte, dice que es fuego y aire; yo suelo sentir que soy tierra, cansada tierra", dice Borges a los 84 años, meses antes de morir. La Rosa de Paracelso es ese cansancio.

Habiendo concluido mi paso por los cuentos de Borges, y declarándome una y otra vez desde hace años como un fanático y un obsesionado de su pluma, solamente diré una cosa: No habrá nadie como él (Borges). Es un genio del vuelo de Da Vinci o de Shakespeare. Cada vez que leo y releo a Borges, un soplo sutil de vida me llega. Gracias por tanto Borges, ahora me espera tu poesía completa.

Un libro donde aparecen cuatro cuentos, lo mejor de su repertorio lo dejó al final de su muerte. Este libro confluye con los temas que a JLB le fascinaba como la metafisica, la fantasía y el tiempo.