LA LADRONA DE LIBROS

Cuando nos introducimos en el mundo de la Alemania nazi, ya podemos saber, en cierta manera, a qué nos vamos a enfrentar: miseria, odio, injusticia… Cuando nos movemos por estos derroteros sabemos que va a ser duro y que se nos escapará alguna que otra lágrima. La ladrona de libros es una obra narrada por la muerte, compañera fiel de la Alemania nazi, lo que me resulta algo tremendamente original, pues, hasta el momento no he leído ninguna novela cuya protagonista sea la muerte (aunque igual es un procedimiento habitual, porque he de decir que me quedan muchos libros por leer). Esta narradora me parece acertadísima porque la muerte es una constante en la obra, algo esperable si estamos hablando del nazismo. Aunque podamos pensar que existen cientos de libros sobre este período histórico, lo cierto es que esta obra podría destacar entre ellos, pues consigue transmitir los sentimientos con una fuerza descomunal y, en cierta manera, podemos ver en ella cierto optimismo. Digo que transmite porque los personajes son excepcionales, la prosa es preciosamente poética y el final es demoledor. Presentar a una niña de 12 años como protagonista de la obra permite introducir un punto de vista inocente, bondadoso y tierno, que consigue que enseguida empaticemos con los personajes, pues los niños albergan grandes sueños, luz, bondad, inocencia, desentendimiento, no entienden de discriminación… Los personajes de la obra son maravillosos, desde nuestra protagonista Liesel hasta los personajes secundarios. Liesel es encantadora: la adoramos porque es una niña fuerte que vive diferentes pérdidas y la crueldad del nazismo, pero también porque es una devoradora y ladrona de libros. Liesel establece unas relaciones de amor, cariño y familiaridad con el resto de personajes que aportan todavía más ternura a la historia: Hans se comporta como un verdadero padre enseñándola a leer, Rosa, en el fondo, expresa el amor a su manera, Rudy se convierte en el mejor de sus amigos, Max e Ilsa impulsa su amor por las letras… La obra, en el fondo, no solo es una reflexión sobre la crueldad del nazismo o ese atisbo de optimismo, bondad y esperanza en la humanidad con personas que actúan como tal, como humanos. La obra es también una reflexión sobre las palabras, los libros. Más bien, sobre el poder de las palabras y de los libros como método de evasión, como intento de ayuda a los demás. El poder de las palabras como motor o lucha de la humanidad. El poder del lenguaje frente al lenguaje del poder. La obra, pues, nos hace sentir. Sentimos odio y rabia por las injusticias, por el abuso de poder, por los prejuicios racistas, sentimos compasión por los personajes buenos pues no merecen la miseria en la que viven, sentimos a la muerte cerca hablándonos directamente sobre su oficio, sentimos la bondad e inocencia de la infancia…, somos testigos, pues, de un período horrorosamente cruel a través de la visión inocente, fuerte y dolorosa de una niña.

“Los humanos me asechan”…. Jamás la Muerte fue más carismática. Había dos grandes razones de peso para que yo leyera esta historia: La Muerte era la narradora y toda la historia trascurre durante la Segunda Guerra Mundial ¿Puedo pedir más? Zusak nos da una historia dulce y desgarradora por momentos. Como no puede ser de otra manera, nos presenta una Alemania nazi donde lo mejor y lo peor de la naturaleza humana luchan sin darse respiro. Lo que más me gusto fue que el autor muestras como no todos los alemanes eran crueles y aprobaban las ideas nazis (idea preconcebida que muchos tienen). La protagonista es alemana, sus padres adoptivos también lo son ¿y qué hacen? Esconde a un joven judío en su sótano. En los peores momentos el ser humano puede sacar lo peor, pero también lo mejor.

Catalogar ésta lectura cómo juvenil, no sería mi primera opción, pero desde luego, estoy de acuerdo en que además de los adultos, las nuevas generaciones la lean, así que vale... aceptamos categoría. Sobre la novela, es una de aquellas historias que te conmueven, entrañables aunque en éste caso algo distinta, ya que está plagada de citas que te hacen saber exactamente qué será lo próximo , y no sé si será justamente éso, pero cada vez que pasaba la página y cada vez que me anticipaban lo que me iba a encontrar, quería más. Una historia más, y no menos cruel, de ésa Alemania nazi plagada de horrores, una historia triste con unos personajes que transmiten ternura, una niña que bien podría ser la viva imagen de la superación personal y una lectura que una vez más, te rompe el corazón en mil pedazos. Curiosa también la manera de presentarnos a La Muerte ( yo me la imaginé mujer... no preguntéis por qué), de una forma "amable" después de tanto dolor vivido. Una lectura estremecedora e impactante contada a través de niños, por lo que es más complicado ser indiferente ( si alguien lo puede ser). Una historia dónde sus angustias, sus miedos, sus anhelos y sus frustraciones las haremos nuestras, nos desgarran el alma. Pero dentro de todo ésto, una lectura bella, porque cómo ya hemos visto en otras novelas del mismo género, la capacidad humana para sobrevivir y sacar esperanzas dónde no las hay es realmente asombrosa.

Lo primero a destacar de la novela es la forma en que esta contada y quien la cuenta, la Muerte, una excelente narradora de la historia de Liesel, una niña alemana de 9 años, que nos relata su vida con sus papás adoptivos, las vivencias que tiene que pasar por culpa de la segunda guerra mundial y nos relata su amor por la lectura. Es una historia que no te deja de sorprender capítulo tras capitulo, además de que son muy cortos y esta bien construido la trama. Los personajes tienen una relevancia importante, que nos muestra su comportamiento ante una situación tan difícil de afrontar y la dureza de vivir en una época como aquella (segunda guerra mundial), así mismo, lograron hacerme reír, llorar, compartir su dolor, su gentileza, bondad y sobre todo la ayuda al prójimo y no ser indiferente a hacer lo correcto. Esta lectura es muy recomendable y que no te dejará indiferente.

La ladrona de libros es la historia de Liesel Meminger, contada por la mísmisima muerte. Liesel es una niña que no sabe leer ni escribir y es dada en adopción a una familia cerca de Munich, en una época previa a la Segunda Guerra Mundial, en este periodo vemos las caracteristicas de la sociedad alemana y el adoctrinamiento nazi. Liesel aprende a leer y desarrolla el gusto por la lectura y los libros. Es una historia muy emotiva, dramatica y conmovedora.

Una historia conmovedora. Una historia que no por ser infantil deja de ser desgarradora, que no está llena de romance y te rompe el corazón, con personajes ordinarios, pero que te muestra lo especial que es cada persona "ordinaria". Imposible leerlo sin sentir un nudo en la garganta. Espero no olvidar esta novela en un largo tiempo. Personaje favorito: Rudy Steiner.

"Los humanos me acechan" dijo la narradora, pues los seres humanos siempre han tenido una estrecha relación con la muerte, la busca, la desea, la invitan a su casa. Excelente recurso literario para narrar la historia, desde su perspectiva, quizá es la muerte quien más conoce la vida y el sufrimiento de miles de almas que perecieron durante la Segunda Guerra Mundial. Esta historia es estremecedora, la realidad brutal que viven los personajes nos hace sentir el sufrimiento. Una niña, un libro, el poder de las palabras y la literatura, pueden salvar la vida, los libros hacen eso, nos salvan la vida. En esta ocasión para mí es una metáfora de lo que los libros y el amor por el conocimiento pueden hacer por una persona. Es una gran historia, que nos sacude y nos hace pensar en lo frágil que es la vida y en lo mucho que tenemos y que otros no vivieron. Es una obra de gran riqueza que la recomendó al cien por ciento, aunque no sea de mi género preferido.

Me acuerdo cuando llevaba un 20% del libro y @Rominaia me comentó que era un libro triste. Pensé, no es para tanto, es una historia dura, pero bonita contada de una forma original. Conforme fui avanzando las páginas, me di cuenta que esa extraña forma de narrarlo, contada desde la perspectiva de la personificación de la muerte (la Parca) me pareció rara y, aunque no me terminaba de convencer, me iba atrapando poco a poco. Como un niño que aún no ha llegado a su adolescencia, me fui enamorando de Liesel, pero con un amor que surgía con toda la inocencia del niño pequeño que aún llevo dentro. Liesel es la joven protagonista de esta historia y ladronzuela de libros. Las páginas seguían pasando y continuaba pensando que, a pesar de ser de la Segunda Guerra Mundial, no era tan duro ni tan triste como me habría esperado al principio. Pero eso sí, la historia cada vez me fascinaba más, me llenaba los pulmones y me despejaba la mente cada vez que volvía a coger el libro en mis manos para leer un poco más. La historia se divide en diez capítulos, los nueve primeros son duros, pero muy bonitos. Llegó un momento que me pareció estar allí, dentro del libro, porque todo, hasta los personajes me eran tan reales que cuando cerraba el libro, seguía pensando que existían. Es muy difícil vivir en una sociedad donde hay sí o sí que pensar todos igual, y sino no te dan trabajo y todo se te hará cuesta arriba. Tienes que odiar a los judios porque es lo que manda Hitler en su 'cuento' del nacismo. Y tenías que odiar a los judíos aunque ellos alguno de ellos te hubiera salvado la vida. Es una historia complicada, ponerse en la piel de estas personas y vivir todas sus experiencias te hace un poco revivir lo que pasó. Pero el libro está muy bien escrito, todo lo trata con cierta delicadeza. No hay apenas palabras de odio ni agresividad hacia quien obliga a todos pensar y actuar en base al 'cuento' de Hitler. El ambiente es muy triste, pero para nada de una crueldad tan fuerte que te haga odiar a las personas que provocaron, con sus decisiones e ideas las muertes de tantos inocentes. La ladrona de libros es una niña inocente, a la que tarda mucho en darse cuenta de la realidad que está viviendo. A pesar de su triste historia, su realidad es otra, la de los niños que juegan al balón por las tardes y de los adolescentes que piden besos a niñas que aún son niñas y que los besos los prefieren leer en los libros. Como decía, el libro son diez capítulos, en todo lo anterior que he comentado me refiero a los nueve primeros. El décimo está formado por las páginas que más me han hecho llorar en mi vida, he llorado todo lo que he podido y más. Durante algunas páginas me dió tregua el autor, pero pronto volví a caer en un mar de lágrimas. Es una historia y un libro preciosos a pesar de la dureza de todo. Es imposible que tras terminarlo no apunte a mi lista otro libro del mismo autor. Hace muchos años vi la película, no me acordaba completamente de nada. De hecho ni me ha sonado la historia mientras me la leía en ningún momento, pues bien, ahora estoy seguro que este libro no lo olvidaré en la vida. Esa es la magia de los libros, los buenos si se quedan a formar parte de ti.