LA ESTRELLA DE PLATA

Jeannette Walls vuelve en esta obra a repetir el éxito de Castillo de Cristal -que a propósito y como siempre ocurre, se deslució terriblemente en la versión fílmica. Es bastante difícil que, a mi parecer, una persona que hoy ostente menos de 40 años pueda entender lo que significa para un niño o niña, ser arrastrado por sus propios padres a situaciones extremas de indefención, donde crecer de golpe se convierta en la única alternativa de sobrevivencia. Cada vez que vuelvo a leer a Jeannette Walls siento absoluta identificación con sus personajes: niños venidos a adultos, llevados como hojarasca a recorrer paisajes y territorios que, en sus tristes condiciones de supervivencia, pasan a un segundo plano. Sin embargo, el escritor- y el lector tomado de su mano- saben que un día esos paisajes, esas vivencias regresarán como traumas, como sueños contradictorios donde, lo aborrecible de las circunstancias hará que los recursos escasos cobren un valor increíble: un par de zapatos gastados, una estrella de plata, un anti-héroe inesperado que llega en el momento justo para redimir una vida intrascendente en el rol importante que cobrará para siempre en la vida de esa infancia, que no volverá nunca más a ser la misma después de que se crucen sus caminos.

Una novela que considero más bien juvenil, de temática insulsa para mi gusto, demasiado predecible, de la que no recibí aportación literaria, salvo unas horas de entretenimiento. Dos chicas muy jóvenes, sufren continuos abandonos de su madre excéntrica, mitómana y nerviosa y al verse solas en la vida, recurren a un tío que vive a miles de kilómetros de su hogar, por quienes son muy bien recibidas. A pesar de ser huérfanas de padre y de tener el ejemplo de una madre irresponsable, ambas son ejemplarmente buenas y ordenadas, incapaces de rebelarse, salvo ante las adversidades de la vida, de la que recibirán una fuerte lección. Me pareció una temática un tanto incongruente.

Una novela que considero más bien juvenil, de temática insulsa para mi gusto, demasiado predecible, de la que no recibí aportación literaria, salvo unas horas de entretenimiento.Dos chicas muy jóvenes, sufren continuos abandonos de su madre excéntrica, mitómana y nerviosa y al verse solas en la vida, recurren a un tío que vive a miles de kilómetros de su hogar, por quienes son muy bien recibidas. A pesar de ser huérfanas de padre y de tener el ejemplo de una madre irresponsable, ambas son ejemplarmente buenas y ordenadas, incapaces de rebelarse, salvo ante las adversidades de la vida, de la que recibirán una fuerte lección.  Me pareció una temática un tanto incongruente.