LA ESPADA DEL ARCANGEL

Cuarto libro de la saga El Gremio de los Cazadores, hasta ahora este ha sido el libro que menos me ha gustado de la saga, no porque sea malo simplemente me costó meterme más en la historia. Una de las razones es que el personaje de Dmititri no era uno de mis favoritos, su actitud tan fría no permitió que me encariñara con él, más bien le tengo respeto. Otra de las razones es que la historia se vuelve más oscura en este libro, trata temas de violación y tortura, sin contar que las escenas de los asesinatos son bastante explicitas. Por esto me costaba un poco más avanzar con el libro. La historia trascurre justo donde termina el tercer libro La dama del arcángel, sólo que aquí los protagonistas no son Elena y Rafael, sino el vampiro Dmitri y Honor una cazadora que hasta el momento no conocía. Honor es una cazadora que ha sufrido un verdadero infierno a manos de un grupo de vampiros por dos meses, tras ser recatada no ha vuelto a ser la misma. Dmitri es el segundo al mando de Rafael, tiene una reputación de que es mejor no meterse con él si no quieres acabar muerto, tiene mil años de existencia y desde que se volvió vampiro ha perdido su humanidad, por un pasado que lo atormenta. Cuando aparece un cuerpo con un misterioso tatuaje Honor y Dmitri se ven en la necesidad de trabajar juntos, ella siempre ha tenido una atracción hacia ese hombre sombrío a pesar de que sabe que puede destruirla. Fue interesante conocer a través de varios flashbacks el pasado de Dmitri, las atrocidades por las que tuvo que pasar y las cosas que tuvo que hacer lo llevaron a ser así. Llegué a entenderlo mejor, así como la gran relación que tiene con Rafael, es de esas amistades donde la lealtad está primero por todo lo que vivieron juntos, han crecido hombro con hombro. Pude dar cuenta de por qué el Grupo de Rafael es tan fuerte, porque son unidos casi como una familia, siempre están para el otro, se respetan y lo más importante hay una absoluta confianza. En cuanto a Honor es una protagonista muy fuerte pero no logró cautivarme tanto como Elena. La relación entre los protagonistas me gustó, hubo momentos muy románticos, con frases debo admitirlo bastante cursis pero que a mí siempre me hacen suspirar. Lo que más rescato de la autora es que plantea muy bien las tramas siempre están llenas de misterios, éstos son los que siempre me han tenido intrigada, descubrir quién es el que está detrás de todo. La saga sigue llamándome mucho la atención, definitivamente la continuaré. La pluma de la autora es descriptiva te sumerge totalmente en esa ciudad de Nueva York llena de ángeles, vampiros y cazadores. Uno de los puntos fuertes que tiene es que en cada libro conocemos a nuevos personajes, lo que hace que una saga tan larga como ésta no se vuelva tediosa siempre con los mismos protagonistas. Son libros de urban fantasy geniales si buscas leer fantasía algo más adulta pero no tan complicada, con misterios, un toque de erótica y mucho romance.

El cuarto libro de la saga, no les voy a decir que son los mejores libros que leí en mi vida, o con la trama más original. Pero son tan adictivos que no termino el último y ya quiero empezar el que sigue. Tiene una construcción y desarrollo de personajes que son la magia que hace que no puedas parar de leerlo, solo para seguir conociéndolos. Nada, si quieren algo fresco, rápido de leer y adictivo, se los recomiendo.

Aquí estamos... doblando el brazo ante postutas anteriores, este cuarto libro del Gremio me ha atrapado como una telaraña tan sutil como venenosa. SOY DÉBILLLLLL... me puede totalmente Dimitri, y peco de caer en la red romántica paranormal de nuevo, sin remordimientos ni tapujos. Peco de embobarme con argumentos cuasi-rosas pero adorablemente emotivos, peco de adorar clishés paradójicamente imposibles y peco de salir corriendo a buscar el siguiente libro de la saga. Indudablemente Dimitri y Jason serán para mi lo que son Zsadist y Rehv en el universo Ward: la ternura del hierro.