Este alumno no es idiota: sólo no entiende la lengua… Pasar de ser protagonista de la enseñanza a ser facilitador o facilitadora del aprendizaje es una tarea a la que se enfrentan cotidianamente quienes se dedican a la educación. Las interrelaciones entre alumnos y alumnas de culturas y, a veces, de lenguas maternas distintas son una oportunidad de enriquecimiento, tanto para el propio alumnado como para un profesorado inquieto y creativo. Ser consciente de la importancia de la lengua como vehículo de comunicación y herramienta de adaptación escolar permite ir más allá de la simple transmisión de conocimientos para centrarse en el “cómo” enseñar: desde la interiorización de los conceptos básicos de adquisición para llegar a la enseñanza humanística que une y enriquece. Éste es un libro claro y práctico, enfocado a la enseñanza de la lengua en contextos multiculturales y plurilingüísticos, pensado para orientar al profesorado en los nuevos retos que plantea el contexto escolar y que centra el proceso en las personas y en su conocimiento global e idiosincrásico para aprovechar estas vivencias en el aula de español.