En la distribución comercial han cambiado muchas cosas durante los últimos diez años. Han cambiado los ángulos, pero seguimos teniendo el mismo triángulo. La tienda sigue sujeta a un bucle que impide la ruptura. La tienda sigue siendo la misma. Cambia la decoración, se reordenan los productos, varía el lay-out, el merchandising, se reuniforma y reforma al equipo humano, se amplían unas secciones y se reducen otras, pero la tienda sigue siendo la tienda. Hace escasamente tres años hubo cierta esperanza de ruptura. Fue con el comercio electrónico. Propios y ajenos se cuestionaron el modelo.