Sinopsis de LA CORTE DE CARLOS IV

Después de haber participado en 1805, con catorce años, en la batalla de Trafalgar, en la que la flota hispano-francesa fue batida por la inglesa, Gabriel de Araceli se encuentra dos años después, en 1807, en la villa y corte. Criado primero de una actriz y después de una aristócrata, resulta así testigo privilegiado de las intrigas y rivalidades que en la corte de Carlos IV enfrentan a partidarios y enemigos del favorito Godoy –el “Príncipe de la Paz”– como del príncipe Fernando, futuro Fernando VII. El malestar popular que fuerza la caída de Godoy y la abdicación del monarca tras el “motín de Aranjuez” en marzo de 1808 y la inmediata intervención francesa, preludio del levantamiento

8 reseñas sobre el libro LA CORTE DE CARLOS IV

Personajes frívolos pasean por la corte de Carlos IV. La nobleza y la dramaturgia se codean, recibiendo la una lo que le falta a la otra y dando lugar a situaciones que rallan en lo ridículo y, casi, casi, poquito le falta, en lo trágico. Entre medias, con su honor innato y sus ingenuas aspiraciones, Gabriel de Araceli, Gabrielillo, que después de pasar por Trafalgar y salir vivo de milagro, cae de bruces como criado de una famosa actriz con contactos en la corte. Moviéndose en este escenario, Benito Pérez Galdós, nos empieza a presentar una de las partes más dramáticas de la historia de España. Los preámbulos que anteceden al comienzo de la guerra de la independencia. Gabriel es curioso y le gusta escuchar y, con él, también nosotros lo hacemos. La exquisita pluma de Galdós mueve los hilos y, así, nos vamos enterando de lo que los españoles de entonces pensaban políticamente y como, muchos de ellos, estaban confundidos. Este spoiler no lo hago yo, sino que lo hacen los libros de historia. Partidarios del príncipe de Asturias, al que creían salvador, y enemigos del otro príncipe, el de la Paz, o sea Godoy, maquinan conjuras y traiciones contra este y los reyes legítimos del momento, Carlos IV y su esposa María Luisa. Por allí cerquita, no muy lejos y al acecho, Napoleón, firmando el pacto de Fontainebleau y a puntito de, discreta y engañosamente, invadir España. En este decorado, junto a Gabriel, los personajes ficticios de la obra de Galdós ; Inés, la voz de la cordura y el amor de Gabrielillo; Amaranta, condesa de gran belleza pero de mal corazón, intrigante y perversa; Lebia, Mañara y Máiquez que forman un triangulo amoroso en el que no faltan los celos y las traiciones; Paquita, la famosa actriz enamorada de Isidoro y, un personaje digno de nombrar, Chinitas, el amolador, hombre inculto pero que percibe como nadie la realidad de lo que está sucediendo. Con todos ellos viviremos en el siglo XIX y conoceremos su sociedad. Pérez Galdós sabe como nadie hacernos vivir aquella época a los que ni de lejos existíamos entonces. Llegando al final del libro las puertas quedan abiertas para continuar viviendo el siglo XIX junto a Gabriel de Araceli. Próximamente el 19 de marzo y el 2 mayo. El comienzo de la guerra y la demostración del arrojo y valentía de los Españoles de entonces. La pluma de Galdós no defrauda, de eso no hay duda.


Hacía tiempo que no leía a Galdós, creo recordar haber estrenado mi libro electrónico con su Trafalgar de la serie de los Episodios Nacionales, en algún rincón del olvido (lugar cada vez más extenso de mi memoria) se refugiaron los avatares de Gabrielillo. La lectura de la Corte de Carlos IV, me han renovado las simpatías por el muchacho y sus agudeza intelectual, así como el devenir de su "novia" Inesilla. Ha sido acabar la gozosa lectura de esta trozo novelado de nuestra historia y comenzar el siguiente episodio. Qué gran maestro de la literatura de nuestra lengua ha sido D. Benito.


Episodios Nacionales, primera serie, segundo libro; publicado en 1873. Después del fatídico episodio de Trafalgar, Gabriel, nuestro protagonista deja Cádiz y llega a Madrid a servir en la corte de Carlos IV. Se verá envuelto en los turbios acontecimientos de la conspiración de El Escorial. La figura del regente de España, Carlos IV, su hijo el príncipe Fernando VII y Manuel Godoy, príncipe de la paz, son el telón de fondo de las intrigas palaciegas y las marrullerías por el poder, en las que se verá envuelto Gabriel. Con una prosa limpia y transparente Pérez Galdós une historia y ficción para mostrarnos los movimientos políticos que acontecían en España a principios del siglo XIX.


En este Episodio, seguimos a Gabriel Araceli hasta Madrid. Alli nos encontramos la vida madrileña de principios del siglo XIX y lo que trascendía de las disputas en la Corte del rey Carlos IV. Interesante como todos los Episodios Nacionales, aún no siendo de los mejores.


Un gustazo meterse de la mano de Gabrielillo en el teatro español de principios del siglo XIX y asistir al estreno del "Sí de las niñas" de Moratín, en esta España ya y por siempre cainita. ¿Y qué decir de la corte de Carlos IV? El coño de la Bernarda, con perdón, pasen los borbones que pasen. La Corona misma de hoy día.


Gabriel empieza su andadura en la Villa y Corte, llena de escenas teatrales, líos, conspiraciones, tramas varias que harán las delicias a los lectores avezados. Sin duda una segunda novela de la primera serie sumamente interesante en la que la Corte del Rey en San Lorenzo del Escorial ofrece una gran posibilidad de entretenimiento.


Me está costando acabarlo, nada que ver con el primer episodio "Trafalgar" que es extraordinario. Mi idea es leerme los 46 episodios... ya veremos...


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FRASES DEL LIBRO LA CORTE DE CARLOS IV

El vicio más feo es el de la ingratitud. Pero ese es el vicio en que menos fácilmente pueden sentenciar los hombres.


Publicado porPaco Garrido

Al suponerme amado por una mujer poderosa, mis primeras ideas versaron sobre mi engrandecimiento personal, y el ansia de adquirir honores y destinos. En esto he reconocido después la sangre española. Siempre hemos sido los mismos.


Publicado porArcadio