Uno de los acontecimientos literarios del año según The New York Times, The Guardian, Publishers Weekly, San Francisco Chronicle, Flavourwire... Los humanos casi se han extinguido. Big Hig no está infectado, así que sigue aquí. Intenta mantenerse con vida en un hangar junto a su perro. También con la ayuda de su pequeño avión Cessna y de Bangley, su vecino violento. Y con un libro de poemas, algo de petróleo y cada lata de Coca-Cola que puede conseguir. Su esposa también ha muerto (está tan solo que inventó una constelación para ella). Incluso cuando parece que ya no queda nada, él quiere continuar. Pero sobrevivir ya no es suficiente. Entonces se le presenta la oportunidad de cambiarlo todo, de lanzarse a la búsqueda de lo desconocido para encontrar algo que jamás hubiese imaginado. Llega por fin la novela que sacudió a la crítica mundial.
El libro comienza un poco lento y hay que darle la oportunidad en sus primeras páginas. Cuanto más páginas pasas más te apasiona el personaje, sus acompañantes y la manera de contar la historia. Una novela que recomendaría a todo el mundo, que habla de la supervivencia, del amor hacia los animales y de las diferentes maneras de expresar el cariño hacia otra persona.