En esta novela se relata la trágica y terrible epopeya de la guerra de Troya, de tres mil años de antigüedad, una leyenda de amor perdurable, odio inextinguible, venganza, traición, honor y sacrificio.
Amo la forma en que Colleen escribe, la ambientación, en especial, y los personajes fueron geniales y originales en igual medida, y ser original con un retelling de la Iliada dice mucho de ella. Me gustó la forma en que trató a los dioses, ellos eran más supersticiones que otra cosa, estuvieron presentes indirectamente, la autora siempre daba pie a pensar que las cosas ocurrían por acciones humanas no sobrenaturales, a diferencia de la original, donde todo se trataba de cómo amaneció tal dios o que tan aburrido estaba, básicamente. Por poner ejemplos, Tetis decía que era una diosa, Peleo la consideraba una loca, Aquiles decía que era víctima de hechizos de su madre y Patroclo pensaba que eran ataques epilépticos, una maldición por desobediencia, solo era Ulises haciéndose el troll, etc. En cuanto a mis personajes favoritos de la original y esta, Ulises sigue siéndolo, tanto el de Homero como el de Colleen. Aquí Héctor y Ayax pasaron sin pena ni gloria, pero sorprendentemente le agarré mucho cariño a Briseida y a Patroclo, pese a que no aparecían tanto como otros personajes. Ella era una mujer que se hacía respetar en un tiempo en que ellas no valían nada y él no era solo el perro faldero de Aquiles, le era leal y lo amaba, pero también lo cuestionaba, tenía sus ambiciones, hasta se decepcionaba. La rivalidad que tenían por el amor de Aquiles me terminó causando algo de gracia, porque pese a que este decía que los amaba a los dos, de forma distinta, pero a los dos, uno se da cuenta que se pasó todo el bendito libro pensando en Héctor y su dichoso combate, lo peor es que Héctor hacía los mismo XD. En fin, me gustó mucho, aunque pasando la mitad se me hizo un poquito pesada.