María Paz es una joven latina que como tantas otras ha llegado a Estados Unidos persiguiendo la utopía. Pero el sueño americano se vuelve pesadilla cuando es acusada del asesinato de su marido, un policía blanco, y condenada a prisión. La novela pega un giro vertiginoso cuando María Paz descubre que el verdadero horror, el que pondrá a prueba todo su temple, está esperando afuera de las rejas.
La pena mata neuronas, ¿sabe? Eso es un hecho, de otra manera no podríamos tolerarla.
Lo supo bien Alejandro Magno, que a todas sus empresas y batallas llevó consigo a sus historiadores, porque sabía que lo que no se narra es igual a lo que no ocurre
El lenguaje de las caricias y los mimos es más hermoso que el de las razones y las discusiones
Salir de la cárcel y regresar a la vida real es para todo preso un parto más difícil que el del nacimiento. La cárcel infantiliza, te vuelve dependiente, todo te lo quita y a la vez todo te lo resuelve.