HISTORIA DE ESPAÑA CONTADA PARA ESCEPTICOS

Lo único que salva al autor de este despropósito histórico es su constante tono irónico aun cuando este en muchas ocasiones sea reprobable. Por muy dirigida que la obra camine hacia el escéptico, Eslava "olvida" a figuras importantes y ensalza a otras que, siéndolas, parecen más dioses del olimpo, que presidentes del gobierno. Pero el mayor problema no es que Escipión o Adolfo Suárez sean intepretados como meros personajes de reparto o que, Felipe González sea tratado como el creador del universo. No. Lo delictivo, históricamente hablando, es la voluntad de asentar como verdad absoluta cualquier rumor obtenido de mentideros y otras casas de postín. Para eso ya tenemos a Pilar Eyre. Los incrédulos lectores, que ya tenemos varios millares de páginas a nuestras espaldas no vamos a creer de su misa la mitad. Sin embargo, el incauto primerizo que busca algo ameno para tener una idea general de la historia de España, tal vez no sepa discernir cuando el autor está haciendo campaña arrimando el ascua a su sardina, o cuando por el contrario, el chascarrillo pudiera hasta ser verdad. Simplemente, si es persona de fe, le creerá a pies juntillas, y ahí está el error. El ensayo de Eslava Galán es uno de los más inútiles que he leído en tiempo. Ni si quiera sus teorías conspiranoicas como por ejemplo la del 23f, son nuevas. Lo de bajarle los humos a la casa Austria tampoco lo entiendo. Carlos V no fue mal monarca y lo más reprochable que hizo como gobernante fue su tibieza inicial con Lutero. Sin contar, claro, su "excelente" papel como hijo. El libro aporta más bien poco. Abundantes chistes sobre la fealdad de los monarcas y las tetas caídas de sus consortes. Grosero, en muchos de ellos. Para mi, una rotunda decepción. Los libros de Eslava Galán suelen ser amenos e históricamente cuestionables, aunque de esto no escapa ningún historiador conocido. Este, en cambio, empieza regular y pierde el norte según se acerca a nuestros días.

Muy entretenido y recomendable. Bien organizado en capítulos breves y de lectura ágil y repleto de ironía, que buena falta nos hace.

Lejos de los libros de historia al uso, Eslava Galán siempre gusta de contar la historia desde el lado minoritario de quien la sufre y no de quien la hace, como se estila. Detrás de su estilo desenfadado, irónico por momentos, y otros muchos de pura guasa, hay un contenido bien tratado bibliograficamente y un ojo crítico con la historia contada por los profesionales del gremio que a veces abundan en hacer un material aburrido. Para disfrutar del bueno de Juan, primero hay que huir de los estereotipos y disfrutar de la historia divulgativa como si de una novela se tratase. Mis respetos al maestro, y a su sentencia, de que sentido del humor y la historia, hacen buena yunta.

En mi opinión, es uno de los mejores escritores de nuestra actualidad. Plasma a la perfección los hechos sin demagogia alguna, con sencillez y respeto. Además de contarlo de forma dinámica y con una gracia que hace divertido aprender nuestra historia. Tal vez, deberíamos enseñar a nuestros hijos libros así en los institutos.

Una historia de España amena, irónica, divertida y muy entretenida. Con un lenguaje sencillo, bien explicado, con anécdotas y comentarios que facilitan la lectura. No es tan trasgresor como Reverte, pero también es fácil y delicioso este libro. Es el típico libro que te lleva su tiempo porque son muchas páginas y el contenido es variado y nutritivo, que no es un novelón que te lo ventilas en dos días, pero te quedas con ganas de repetir, te prometes una relectura al menos dentro de un año para anclar conocimientos y volver a deleitarse con el contenido y las buenas maneras del autor. Y además descubres que el fulano ha escrito más libros de historia para escépticos, para gente común. No siendo necesarios profundos conocimientos previos para descubrir y disfrutar de estas obras. Pues al tajo, a instruirse y a disfrutar con estas gratificantes lecturas.

Libro que deberían recomendar en la escuela, historia de españa muy reconmendable

Un rápido repaso por la historia de España, a veces va tan rápido que te puedes perder , quizás demasiadas cosas para un solo libro.....pero como inicia la historia de España esta bien

Si bien es cierto que uno de los objetivos de la historiografía es hacer llegar la historia a muchos, lo que hace Eslava Galán es simplificarla sobremanera desde un punto historicista hace años abandonado por las academias. El estudio de la historia o de una sociedad en un espacio y momento concreto, que es lo que pretende abordar el autor, es una tarea más que compleja imposible y que nunca da como resultado un tema tan amplio en tan pocas líneas. Su lectura puede ser entretenida, pero nada más. Es muy peligroso tomarse la historia de esa forma tan simplista, pues puede dar lugar a muchas interpretaciones falsas y cargadas de sentimientos que no tienen cabida en la materia. Las obras de Eslava Galán cumplen con la función de servir de pasaporte a futuros historiadores pero sobre todo de la de vender libros. Algo bueno y algo corriente. Por favor, tomémosnos sus obras como entretenimiento y curiosidad pero no como realidad histórica.