En el proceso de calidad turística, la fase de información que suele ser uno de los primeros contactos reales que se tienen con un destino, reúne una enorme importancia, siendo esencial a la hora de la valoración por parte del visitante y del consiguiente grado de satisfacción. En consecuencia, la disposición de un servicio público de información turística bien organizado, de calidad, fácil acceso e identificación y con buena imagen, resulta fundamental en el proceso de modernización de las Administraciones Públicas, que debe contribuir al refuerzo de la competitividad y a la mejora de la calidad.