¿La ves? Está ahí, en el horizonte, a la par del sol de la mañana. Es una oportunidad y una elección. La oportunidad de hacer que este sea un gran día. Después de todo: “Este es el día que el Señor ha hecho; regocijémonos y alegrémonos en él”. Pero ¿y esos días de embotellamientos, aeropuertos cerrados y amigos que se olvidan? Aunque la vida te cuelgue o te golpee, cada día está lleno de esperanza en la promesa y propósito de Dios. En Nuevo título de Max Lucado, publicado anteriormente como