Marty y Dusty forman un matrimonio feliz. Una felicidad apenas enturbiada por la feroz agorafobia de Susan, la mejor amiga de Martie, y los problemas mentales de Skeet, el hermanastro de Dusty. Afortunadamente, ambos están al cuidado -Susan desde hace tiempo, Skeet después de un episodio psicótico- del doctor Mark Ahriman, un famoso y competente psicólogo, tan inteligente como encantador. Sin embargo, Dusty duda. De los desarreglos mentales de Susan y Skeet primero, pero, después, de los que empieza a sufrir su mujer y de sus propios e inexplicables lapsus. Una situación sobre la que no puede evitar pensan que Ahriman tiene mucho que ver. Y de ese modo, a medida que sus sospechas se convierten en certidumbres, Dusty y su mujer se van adentrando en un universo de pesadilla.
Novela muy entretenida, con mucho ritmo, como es habitual en el autor, quizá unas de las mejores que haya escrito.
Novela entretenida, que que engancha poco a poco, muy estilo Koontz, donde se mezclan fobias con asesinatos . Recomiendo leerla.
El coeficiente intelectual del doctor Ahriman era tan alto como bajo el umbral de su aburrimiento. Además, las probabilidades de éxito usando técnicas tradicionales de lavado de cerebro eran poco estimulantes, y el nivel de control obtenido, rara vez total.
Martie se sentía poseída por un extraño e inexplicable potencial para ejercer la violencia, y temía herir a algún inocente durante un ataque de locura temporal. En esos momentos, empezaba a creer que, presa de un arrebato irracional,sería capaz de levantar la mano contra sí misma