De nuevo vuelvo a Fairy Oak este año, pero no me arrepiento porque verdaderamente lo necesitaba. Fairy Oak es una saga que me trae paz interior, es volver a rencontrarme con amigos de hace años y son unos amigos que cambiaron todo para mí y me hicieron como soy ahora. Comencé este libro llorando y lo terminé también con lágrimas, creo que es imposible no hacerlo porque la historia te toca y sin lugar a dudas el Capitán merecía este relato. Historia interesante y emocionante, un digno final para uno de los personajes más queridos por nuestros protagonistas