ESPEJOS DEL ALMA

La poesía de Jalil Gibrán es maravillosa, abriendo la puerta a la hermosa cultura arábiga, que estaba cerrada por otros poetas árabes que se enorgullecían de usar términos que sólo podían entenderse después de consultar el diccionario. "El arábigo es un idioma enérgico y posee un vocabulario pródigo en palabras de bellas connotaciones. sus delicados matices de calidades y color forman con sus melodías una sinfonía cuyo sonidos provocan en el oyente las lágrimas o el Éxtasis". Fue este comentario que comencé mi admiración por el idioma árabe, que por cierto, gran cantidad de palabras no tienen traducción; de hecho el canon occidental de la poesía en versos y rimas, es para ellos una vulgaridad. Mi primer contacto con Gibrán fue un pequeño poema que no viene en este libro y que se llama "Las sonámbulas". Un poema que recomiendo a personas con madurez o que estén pasando una terapia psicológica con respecto a cierto tema.