Esther Vilar ha dado media vuelta a la marcha emancipatoria: el señor es la mujer. Ella doma al hombre con trucos traidores para hacer de el un esclavo” sumiso, y luego lo lanza a la vida hostil para que gane dinero. “Como contraprestación” pone “la vagina a su disposición a intervalos regulares…?. Así resuelve Esther Vilar el arcaico enigma tejido en torno al mundo de la mujer y desenmascara a sus compañeras de sexo como a unas empedernidas explotadoras que obtienen su buen capital de la mera anatomía. Esther Vilar mueve a contradecirla en muchas de sus heterodoxas ideas pero, sinceramente hablando, a veces no es posible hacerlo.
Cuando lo comencé a leer creí que era una sátira dirigida a las ideas del hombre sobre la mujer, pero oh sorpresa, al investigar resulta que Vilar es como una especie de "defensora del hombre", que ha tratado de reivindicarlo de las "acusaciones tan injustas en las que ha estado viviendo hace tiempo sin darse cuenta que las verdaderas machistas son las mismas mujeres. A base de cuestiones en su comportamiento y su modus operandi llega a conclusiones de que el hombre es realmente una marioneta preparada desde pequeño para servir a la mujer y completar esta supuesta dualidad para la que fueron creados. Hasta cierto punto suena controversial, pero para mí no es más que real el análisis, porque he tenido la oportunidad de ver reflejados algunos de estos comportamientos que describe en mi contexto cercano. No digo que todo lo que escribe pase porque no he podido analizar todas las circunstancias que describe pero creo que es una buena obra que nos da otra cara de la moneda de la que estamos acostumbrados a girar, porque no olvidemos que ella misma es una mujer, y que entiende más su forma de pensar que el hombre, y no por machismo sino por la inherente cuestión de que "entre iguales nos entendemos", triste realidad porque al final realmente todos somos iguales y deberíamos entendernos, no solo entre hombre-hombre y mujer-mujer como nuestra sociedad nos ha acostumbrado por años. Y creo que este libro es muy aplicable a esta época (aunque fue escrito hace ya algunas décadas) y sabemos cómo son nuestros comportamientos actuales y no podemos engañarnos diciendo que todos están en contra de nosotros porque nos sentimos ofendidos y en vez de eso aceptemos en lo que estamos fallando y tratemos de mejorar.
Un libro que da mucho qué pensar, polémico, irreverente, directo, contradictorio. Las opiniones de la autora tienen más valor pues las hizo en una época en donde la mujer empezaba a tener un lugar predominante. En mi opinión, un libro que debería leerse y comentarse.
«Las mujeres hacen que los varones trabajen para ellas, piensen por ellas, carguen en su lugar con todas las responsabilidades. Las mujeres explotan a los hombres. Y, sin embargo, los varones son robustos, inteligentes, imaginativos, mientras que las mujeres son débiles, tontas y carecen de fantasía.» esto y más relacionado se puede leer en este libro, un completo argumento del pensamiento genérico de hombres y mujeres con agregados toques de subjetividad, quizás un enfoque psicológico al arquetipo de hombre y mujer, ya perdí la cuenta de las veces que lo he releído, me parece fantástico y hasta insólito, solo con leer «un observador extraterreno pensaría sin duda que el varón es el ser más digno de veneración que hay en este planeta; en todo caso, está fuera de duda que lo consideraría mucho más atractivo que la mujer, por ejemplo. Pues el varón tiene dos excelencias respecto de la mujer: es hermoso y es inteligente. Ha hecho falta una confusión secular de todos los criterios para que la mujer se convierta en el bello sexo. Ya el mero hecho de que es más tonta que el varón bastaría para refutar esa afirmación absurda.» esto es algo que los varones sabrán muy bien que no se escucha todos los días, más bien todo lo contrario. A su vez la autora, sí una mujer, lo cual causa aún más impresión, propone su hipótesis para fundamentar sus argumentos; Una escritura bastante concisa, determinada, sin tapujos...y me atrevo a decir que hasta muy esperada. Un maravilloso y excelente enfoque que juzga el pensamiento y actitud del mal llamado «bello sexo» recomiendo a todo varón que ha sido ridículamente criado para profesar veneración/sumisión hacia la mujer leerlo, y a toda mujer leerlo con objetividad. Deseo aclarar que este libro realmente no busca desacreditar o infligir sobre las mujeres, solo busca reflexionar sobre un tema sociológico que a su vez se destiñe en muchos más de vital importancia.
"Todo sistema de creencias se funda en una doma, pues consta de cierto número de reglas o mandamientos y de un catálogo de castigos subsecuentes a la transgresión de esas reglas (a los llamados <<pecados>>)."