En El tamaño de mi esperanza, segundo libro de ensayos de Jorge Luis Borges, se encuentra ya la característica mezcla de apego a lo criollo, a la pampa y al suburbio, de inquietud por la literatura y de preocupación por el lenguaje que caracteriza buena parte de la obra del maestro argentino. Como ocurriera también con «Inquisiciones» y «El idioma de los argentinos», el libro, publicado en 1926, fue preterido en seguida por su autor, probablemente por el uso que hace en él de un vocabulario y ortografía criollistas y por su implacable autoexigencia: «Como el Gran Inquisidor -dice María Kodama en el prólogo al volumen y refiriéndose al mismo-, a través de un donoso escrutinio, Borges creyó haber alcanzado su destrucción [...]. Quizá el Gran Inquisidor, en su afán de buscar lo perfecto, fue injusto con ese libro de juventud. Creo que los lectores se alegrarán de que la obra exista.»
En “El tamaño de mi esperanza” (1926) el lector encontrará a un Jorge Luis Borges muy joven, no al escritor experimentado. Ello se nota en algunos juicios de valor que después con el tiempo moderará (otros los profundizará … es Borges). En este libro une su amor por lo criollo y por el cuidado del lenguaje. Se dedica a hacer justicia y a “destrozar” al estilo Borges, a todos aquellos que deforman y empobrecen el lenguaje. Esto en 1926, se imaginan lo que diría si hoy escucha el mal llamado “lenguaje inclusivo”…. Menciona a los lugares ricos en pobreza (jamás podría haber imaginado casi 100 años después que su país en ese momento entre las 5 primeras economías del mundo hoy sería uno de esos lugares). Allí reflexiona sobre las precisiones y atrocidades de otras lenguas y modismos del español ibérico y del argentino. También sobre la poesía (“He declarado ya que toda poesía es plena confesión de un yo, de un carácter, de una aventura humana”). Carga las tintas sobre escritores de “rimas fáciles”. Es un libro muy rico de principio a fin, todo aquel que disfrute la literatura debe leerlo. Es una “obra de apoyatura” para comprender mejor a Borges y su pensamiento, no es para debutar por aquí para quien no lo leyó aún. Lo disfruté mucho y me dibujó una sonrisa de principio a fin.
Maravilloso trabajo de Borges. Logra una buena combinación entre sus pensamientos políticos y sus reflexiones sobre la cultura
A la larga, toda aventura individual enriquece el orden de todos y el tiempo legaliza innovaciones y les otorga virtud justificativa. Suelen ser muy lentos los trámites.
¿Qué es poesía? Aunque soy diestro en descubrirla en cualquier lugar: en la conversación, en la letra de un tango, en libros de metafísica, en dichos y hasta en algunos versos.