Esta antología del filólogo Antonio Alatorre posee las condiciones de un trabajo escrupuloso y de perfiles reveladores; encumbra la condición poética lejos de las preocupaciones académicas, sin desdeñarlas categóricamente. Se trata de un recuento de lecturas apasionadas y análisis fervientes, provenientes del crítico riguroso que escribe con amenidad y sencillez.