El ser relacional sustituye las preocupaciones tradicionales por el individuo y la comunidad y nos ilumina en cuanto al significado de las relaciones. Propone que nuestro bienestar futuro -tanto local como global- depende de que coloquemos las relaciones en primera fila de nuestro interés, que todo el significado surge de la acción coordinada, por lo que aquello que consideramos real, racional y valioso depende del bienestar de nuestras relaciones. Con este planteamiento Gergen desafía la idea de la mente individual como algo separado de los demás. Efectivamente, este libro propone una concepción completamente nueva de la psicología. No son las mentes individuales las que se reúnen para formar relaciones sino que el funcionamiento individual surge de la relación.