Ella: francesa, apasionada, tenaz, independiente. La arqueología es la pasión de su vida. Quiere encontrar los restos del primer homínido de la Tierra. Él: inglés, taciturno, inteligente, solitario. Su pasión es la astronomía y su sueño averiguar cuál fue la primera estrella. Los dos recorrerán el mundo persiguiendo lo que podría ser la respuesta a sus preguntas, sin darse cuenta de que en realidad se buscan el uno al otro. Tal vez, cuando se atrevan a admitirlo, sea demasiado tarde.
Este libro me ha gustado, aunque no ha superado Las cosas que no nos dijimos, pero está bastante bien, aunque si esperáis un libro romántico, y lleno de escenas de amor, este no es vuestro libro, porque a pesar de la sinopsis, yo definiría el libro como aventura, algo de misterio, y lucha por los sueños. El libro en sí me ha gustado, porque la trama me parece original, aunque debo admitir que los personajes no he terminado de conectar con ellos, especialmente con Keira, ha habido ocasiones en las que me ha caído mal, pero bueno, estaba Walter para compensar que es muy divertido. El final es un poco abierto, y te deja como algo contradictorio, supongo que porque se revuelve en la segunda parte. En resumen, es un libro que recomiendo, aunque de momento no voy a leer la segunda parte, pero cuando lo haga os lo contaré.