Al gato Floro le gusta mirar desde su ventana el majestuoso vuelo de la cigüeña del pueblo.
La verdad es que a Floro le encantaría poder volar, y ver todo desde el cielo. Por fin un día se arma de valor, se sube a un tejado, se lanza y ... despega.
0 reseñas sobre el libro EL GATO QUE QUISO VOLAR ALTO