Un cuento tan entreverado como la misma vida...del autor. Mezcla en el tres generaciones que se conectan a través del elixir que posee el padre y que le hará, aún tras una longeva vida , regresar de la muerte. Su hijo, ambicioso, adepto de grandes juergas y quien desea su muerte para heredar, desatiende sus indicaciones, al menos parcialmente, revive un ojo de su padre sólo para constatar el poder del elixir. Con los años y teniendo un único hijo , le da indicaciones para la hora de su muerte, con un resultado un poco más que irónico. Entremezcla religión, religiosidad, falta de fe, con uso de pociones mágicas, venta de indulgencias, e incluso canonización. A manera de burla e ironía. Ironía que alcanza su punto culminante en el final, donde la falta de fe se come literalmente a quien medra con la religión. Cuento que en esencia trata de mostrar que al final todos terminaremos pagando nuestras deudas. Un cuento corto y harto curioso de quien abrazo el romanticismo y el naturalismo en su monumental obra “ La comedia humana” , de la cual una pequeña muestra representativa resulta una de sus obras mas conocidas “ Papa Goriot “
La muerte es tan repentina en sus caprichos como lo es una cortesana en sus desdenes; pero más fiel, pues nunca engañó a nadie
En aquella adorable Italia , la vida disoluta y la religión se acoplaban tan bien , que, la religión era un exceso, y los excesos una religión
La tierra bendecía, el cielo maldecía. La iglesia tembló en sus antiguos cimientos
Estaba muerto, muerto perdiendo su única, su última ilusión. Buscando asilo en el corazón de su hijo encontró una tumba más honda que las que los hombres cavan habitualmente a sus muertos.
La muerte es tan repentina en sus caprichos como una cortesana en sus desdenes, aunque más fiel: nunca ha engañado a nadie.