Fruto de un hallazgo fortuito en el archivo de José Saramago, este libro es el último de los diarios personales que el escritor portugués dejó escrito y que se quedó, como declara el propio autor, "agarrado al disco duro deo ordenador ".
En este diario Saramago nos cuenta los acontecimientos más importantes de casi todos los días del año 1998, el año en que ganó el premio Nobel. Me gustó conocer el hombre detrás del libro y comprender qué le llevó a escribir cada libro y por qué escribe de este modo tan particular y que como escritora me hace sentir tan identificada. Pero en mi caso fue un libro aburrido de leer en comparación con otros diarios que he leído y que son de hecho mi género literario favorito. Lo que pasa con Saramago es que se centra mucho en temas políticos, y como no son de mi interés terminan por hacer agotadora la lectura. Fue interesante que puso algunas cartas de sus lectores y entrevistas que le hicieron, así como el discurso completo que hizo cuando recibió el premio Nobel. Creo que es más interesante para lectores que se interesan por la filosofía y la política más que por la literatura. De todos modos siempre conocer un escritor más a fondo es interesante para quienes escribimos.
No escribo libros solo para contar historias... Invento historias para expresar preocupaciones, interrogantes…»
Miremos en silencio, aprendamos a oír; tal vez después, por fin, seamos capaces de comprender.»
El tiempo es una tira elástica que se estira y se encoge. Estar cerca o lejos, allá o acá, solo depende de la voluntad».
como si todavía insistiese en buscar una complementariedad perdida para siempre.
Personas diferentes tienen el mismo nombre, decir el nombre no es suficiente para “decir” la persona.
el acto de apretar un gatillo se ha hecho tan habitual en nuestra especie que hasta el cine y la televisión ya nos dan lecciones gratuitas de ese arte a cualquier hora del día y de la noche