EL CRIMEN DEL GANADOR

Segundo libro de la impresionante "Trilogía del Ganador". Donde aparece más marcado el despotismo del imperio, las intrigas de palacio y las conspiraciones y secretos alrededor de toda la historia. Es una lucha a muerte en la que Kestrel se arriesgara a traicionar a su país por amor. Los dilemas de los personajes me fascinaron y me partieron el corazón. Y "seguir tu corazón puede ser un crimen". Y la trama revela el alto precio de las mentiras peligrosas y las alianzas poco confiables. Kestrel se debatía entre ingresar al ejército y/o casarse. Y en una elección estratégica decide casarse con el príncipe heredero de Valoria, sin revelarle nunca a Arin que lo hizo para salvarlo a él, a Herran de la destrucción masiva y nombrarlo como gobernador de Herran. Pero él no cree que la decisión que tomó ella haya sido por voluntad propia. Algo le dice que todo eso existe para esconder alguna cosa que no logra ver completamente. Ahora ella vive en Valoria, siendo tratada como una princesa, pero su corazón todavía está con Arin. Ella tiene que convivir con un emperador totalmente absolutista y que está hambriento de poder, guerra y territorio. El emperador la quiere como futura hija porque es una gran estratega. Pero ella tiene sus propios planes políticos que incluyen continuar tratando de ayudar a Arin desde su nueva posición y mantenerlo a  distancia para que nunca se entere del sacrificio que está haciendo.  Pero sus sentimientos por Kestrel deben quedar reservados cuando empiezan a salir a al luz pruebas de que el imperio está a punto de incumplir su pacto con el pueblo herraní, así Kestrel se apunta para averiguar cuál es el secreto sin levantar sospechas. Muy difícil cuando su aspecto la delata y se encuentra en constante vigilancia por el Emperador. Así que podemos volver a ver la inteligencia y audacia de Kestrel en acción, con las estrategias que usa para salirse con la suya. Es algo que me gustó mucho de ella.  Porque estando prometida, miente y hace trampas, convirtiéndose en una espía dentro de la corte, pasando información a Herran,  metiéndose en problemas cada vez más profundos y no ve la trampa antes de caer en ella. Y si la atrapan quedará expuesta como una traidora a su país. Y el Emperador no confía en Kestrel y la vigila de cerca, especialmente en lo que respecta a los Herrani. Un movimiento en falso y hará que Kestrel pague lastimando a alguien que ama, y  el dolor, la traición, las inoportunas decisiones y el espionaje, harán que Arin y Kestrel se distancien cada vez más. Y Arin ve que algo grande está a punto de pasar y toma la decisión de viajar durante días para encontrar aliados para hacer frente a la fuerza del imperio. Y, aunque muchas vidas están a punto de perderse, el amor es lo que siempre se mantiene firme al final. Esta segunda entrega fue tan apasionante que estaba absorto en la historia y cualquier intento de hacer algo útil o productivo estaba condenado desde el principio. Colgué un cartel de "no molestar" en mi puerta para leer y disfrutar de esta fantástica historia  increíblemente bien escrita. Con una trama sorprendente, atrapante y con unos giros argumentales que me mantuvieron al borde de mi asiento con mi corazón hecho jirones en mi garganta. Saboreé tanto como pude hasta que ya no pude resistir el impulso de terminarlo.

Aun no se si 3 ó 2.5 estrellas. La protagonista sigue sin convencerme del todo y durante todo el libro vemos situaciones (drama) que se desarrollan a través de mentiras o malentendidos o verdades a medias y eso no me agrada en ningún tipo de historia. El libro es muy fácil y entretenido de leer, y el final te deja con ganas de continuar con la trilogía .

Juegos de poder y de blancos y negros (que son en realidad grises fosforescentes). No he podido con mi genio y terminé el segundo con ganas de echarle el guante al tercero. Una narrativa sencilla, con personajes secundarios complejos que me gusta analizar en ese desmenuzar de personalidades que amo hacer en los libros, independientemente a la existencia de esas piezas algo estereotipadas que se ven en la historia. Una historia de ajedrez orientado a YA con una mezcla de romance un chiqui rosa, pero que en general suma puntos para animar a leer la trilogía entera.

Me gustó mucho más que su primera parte, definitivamente fue una gran decisión continuar con esta saga. Hablemos de diversos puntos de la novela: -Finalmente logré empatizar con Kestrel, al principio es algo difícil pero al avanzar con la lectura fui descubriendo más aspectos suyos, comprendí sobretodo su enorme deseo(que casi era un obligación) de enorgullecer a su padre, pues yo en parte de mi vida, en especial durante la adolescencia, lo sentí también. -Arin no es de mi total agrado pero aquí también sabemos más de él, lo vemos dudar de lo que siente, de lo que cree que debe hacer, lo vemos sufrir, lo vemos revelarse a su manera, etc. Pensé que era un personaje que me era totalmente indiferente hasta que cerré el libro, allí finalmente noté que al igual que con Kestrel de alguna manera también lo llegué a comprender. -El pueblo de Dacra me encantó y deseo saber más al respecto en la siguiente entrega. -Personajes como Risha, Verex o Roshar me llamaron muchísimo la atención y el final de la novela me pareció perfecto. -Admito que los primeros capítulos me fastidiaron bastante, ya que se basaron en los protagonistas filosofando sobre sus sentimientos y eso está bien, pero ellos lo hacían absolutamente todo el tiempo llegando así a ser cansino, sin embargo una vez superada esta fase la lectura se hace mucho más digerible y hay una mejora notable. -Jess y Ronan, no estuvieron bien desarrollados en la primera parte haciendo así que todo lo que tenía que ver con ellos me fuera indiferente. En conclusión es una segunda parte bastante buena, a mi parecer mejor que su predecesora, la autora escribe de una manera hermosa y creo que cualquier persona que guste de la literatura juvenil o de los romances prohibidos con toques épicos y angustiosos podría llegar a disfrutar con estos libros. Lo recomiendo.