El éxito apabullante de la Guerra del Golfo levantó todos los precintos de precaución y prudencia en la construcción de ese Nuevo Orden Mundial. Por eso, el 'éxito nunca es definitivo'. El triunfo de la comunidad internacional relajó el esfuerzo de cohesión que se había venido realizando desde 1945 y cada actor se lanzó a la construcción del nuevo orden en función de uss expectativas, valores e intereses.