Lennie Walker tiene diecisiete años y vive con su tío, Uncle Big, y su abuela, Gram, y ha perdido a su hermana mayor, Bailey, hace poco menos de un mes, fallecida repentina e inesperadamente debido a un problema cardiaco cuando preparaba su boda con Toby Shaw, su novio de toda la vida; muy avanzado el libro se sabrá que ha muerto embarazada. La madre de Lennie y Bailey, Paige, las abandonó hace mucho; la familia vive de las flores que cultiva Gram y de un empresa informal de catering en la que Lennie prepara lasañas. Lennie es, además, una dotada clarinetista y una lectora ferviente y continua de Emily Brontë (ha leído Cumbres Borrascosas veintitrés veces).
Pese a que la historia llama a ser emotiva, a mí no me ha conmovido demasiado. El libro parte tras la premisa de la muerte de Bailey, la hermana mayor de Lennie, nuestra protagonista, una adolescente de 17 años que, tras la temprana desaparición de su madre, vive con su abuela y su tío. El libro es corto, es sencillo de leer y la verdad que diría que es bonito y es una historia entretenida, pero lo cierto es que tengo que destacar detalles negativos que me han ralentizado el engancharme a la lectura. Uno de los problemas con los que me he encontrado ha sido la misma Lennie. No porque su personalidad fuera tal o cual, que también, sino porque he sentido que el personaje no estaba bien construido. Actuaba cometiendo los mismos errores una y otra vez, pese a que ella misma decía que no volvería a cometerlos. Me ha parecido pretenciosa y poco adolescente para tener 17 años. No me preguntéis en qué exactamente: en todo, en general. No es que Lennie me haya parecido muy madura para su edad, es que no me parece que una adolescente sea como Lennie, sin más. No sé, no he empatizado nada con el personaje. Por otro lado, tenemos romance. Concretamente, un insta-love. Y esto sí que fue un plot twist para mí nada más en las primeras diez páginas porque no esperaba romance en un libro como este, y menos romance con triángulo amoroso incluido. Aparte de que el insta love ya es poco creíble de por sí, todo en este aspecto me ha parecido poco creíble. En cuanto a la trama, sí que es cierto que se explora la relación entre las dos hermanas, cubre buena parte de la historia, y sí que resulta emotiva porque se añade un elemento que me pareció muy original: los capítulos contienen trocitos de notas o cartas -como las que escribíamos en clase con los compañeros-, escritos por Lennie o Bailey, conversaciones "secretas" de hermanas, que tenían antes de la muerte de Bailey. Me pareció una forma muy tierna de incluir un personaje fallecido en la historia y de explicar la relación fraternal. El personaje que más me ha gustado ha sido el de la abuela, ojalá el libro hubiera estado narrado desde su perspectiva y no desde la de Lennie.
La vida es aquí y ahora, es un gran libro... Te muestra como lennien pierde a su hermana y como poco a poco aprende a sobrellevar todo alrededor de su muerte. Cosas que no sabia de ella, que creia conocer. Jamás superas el perder a alguien en tu vida... simplemente aprender a vivir con ello. Lloras con el, a veces la vida es tan corta para aquellos que lo tienen y quieren todo. Que sólo les faltó fue tiempo. Y sientes que es injusto. 100% recomendado. Es bello. "El cielo está en cualquier lugar... empieza en tus pies"