EL ARTE DE LA VIDA: DE LA VIDA COMO OBRA DE ARTE

Tengo 31 años, soy soltera y no tengo planes de casarme ni de tener hijos. Mi más preciado tesoro es una pequeña biblioteca de libros que he coleccionado desde que percibo un salario. Me encanta la soledad y me agobian las multitudes. Mi vida laboral comenzó a los 23 y en este lapso he tenido seis trabajos, dos de ellos relacionados a mi carrera, el resto no. Soy producto de mi tiempo histórico, de un tiempo moderno líquido en el que la norma es el cambio, la fluidez y la inestabilidad. En el que que huimos del compromiso; en el que compramos para experimentar cosas nuevas; en el que nos inclinamos hacia individualidad; en el que los trabajos y las relaciones humanas son pasajeras. El mundo se ha convertido en una enorme masa fluida, carente de una estructura fija, en el que la única certidumbre es la incertidumbre. Bauman sostiene que en este mundo líquido, en esta sociedad de compradores "somos felices mientras no perdamos la esperanza de ser felices". De ahí se deriva que compremos objetos o servicios para vivir nuevas experiencias. También de ahí se deriva que veamos nuestra vida como un cúmulo de episodios todos ellos diferentes los unos de los otros, y cada uno encerrando la posibilidad de encontrar la felicidad: así sucedió que en un capítulo pasado de mi vida estudié microbiología pero en el capítulo presente me dedico a las redes sociales; o igual puede ser que en el capítulo actual lleve una dieta omnívora y en el siguiente capítulo de mi vida me vuelva vegana ¿Quién sabe? En esta época, el cambio es la norma. Creo que en este libro se exponen varias ideas muy interesantes pero no me voy a detener en cada una de ellas porque esta reseña se haría interminable.Solo quiero cerrar aclarando que este libro no contiene una receta para la felicidad, es más, ni siquiera tiene una definición fija de lo que es la felicidad, ya que como Bauman dijo en una de sus tantas entrevistas: “No hay una sola forma de ser feliz, sino muchas, y estas están determinadas por el destino -todas aquellas cosas que nos suceden pero sobre las cuales no tenemos ninguna influencia-, y nuestro carácter [...]. El destino nos presenta la pluralidad de opciones que tenemos para obtener la felicidad y nuestro carácter elige entre estas opciones". Más bien lo que ofrece es una explicación de cómo nuestro tiempo histórico está moldeando nuestros valores y por lo tanto, nuestra idea sobre la felicidad.