EL ÁNGEL NEGRO

En esta novela policíaca tenemos como protagonista a Dave Gurney. Dave es un inspector de homicidios de Nueva York que decidió retirarse del trabajo de campo para dedicarse a enseñar a los futuros inspectores del país. Pero un día recibe una llamada de un antiguo compañero de homicidios ahora jefe de policía de Lanchfield que necesita su ayuda para resolver un crimen que se ha ido tornando cada vez más complicado. Angus Rusell, un viejo millonario y todo poderoso de Lanchfield es encontrado asesinado en su mansion con la garganta cortada de lado a lado. Todas las pistas apuntan como claro culpable a un rebelde sin causa, Billy Tate. Pero todo se tuerce cuando unas imágenes demuestran la muerte a raíz de un rayo de Tate un día antes del asesinato. La investigación nos va enseñando cada vez los caminos intringulados de un pueblo en apariencia ejemplar pero que en realidad está cargado de oscuros secretos entre sus habitantes. La novela va dando giros conduciendote cada vez hacia un sospechoso diferente para finalmente darte el bombazo final. El libro va de menos a más empezando de menos a más. Ocasionandome al principio serias dudas de si había escogido bien para ir poco a poco cogiendo fuerza y dejándome con ganas de más. A mitad de libro me enteré que este era el último de una saga pero me lo he podido leer individualmente sin problemas.

Este libro la verdad que no me ha gustado mucho, creo que tiene una buena trama, pero me ha costado muchísimo engancharme, seguramente no era el momento para leerme el libro. La primera parte del libro es muy lenta pero te entretiene algo, pero en la segunda parte hay muchas cosas de relleno como reflexiones que no tienen nada que ver con lo que sucede, situaciones y diálogos irrelevantes y muchas repeticiones de lo sucedido en el libro, es decir muchos altibajos aunque sí que hay alguna que otra sorpresa que consigue que te deje con la boca abierta. Otra cosa es que sigo intentando descubrir porque sucede todo porque sinceramente no me ha quedado claro del todo, porque todo sucede tan rápido en las últimas páginas que me ha costado entenderlo y asimilarlo. Algo bueno que podría destacar del libro es que está divido en tres partes, las cuales están formadas por capítulos cortos que ayudan a que el libro se te haga lo menos pesado posible. En cuanto a los personajes la verdad no he conectado con ninguno, el protagonista me parece muy lineal, pero lo entiendo porque es el primer libro que leo y seguramente si hubiera leído todos los libros hasta este si que hubiera notado una evolución.

¡¡¡Marabilloso!!!...

Siguiendo la saga. Es más de lo mismo.

Continúa la saga de David Gurney con otro libro con un ritmo trepidante, con continuas vueltas de tuerca y donde todas las pinceladas que el autor nos va dando desde la primera página conectan perfectamente al final. Es cierto que si has leído los anteriores títulos pues el factor sorpresa de leer a John Verdon se ha perdido, y que puede que no te atrape tanto, a mí me ha pasado pero he de reconocer que el listón esta saga lo tiene muy alto desde que empecé a leerla con "Se lo que estás pensando". El binomio Verdon & Gurney nunca defrauda 8/10

Sin miedo a equivocarme, ha sido la mejor entrega de la saga del detective Gurney. Un caso enredo no solo por el caso mismo, sino también por los criterios del detective. Personajes definidos, la mayoría secundarios, pero con una participación importante dentro del caso. El detective siempre meticuloso, confiando siempre en su sexto sentido , que no falla, y con el soporte de la esposa Madeleine, que siempre es el ancla que lo mantiene atento a los pequeños detalles.

Hacía tiempo que no leía nada de John Verdon y este era uno de los libros que tenía pendiente de él. En comparación con los demás libros, debo decir que éste lo vi más flojo y quizá el que más me ha costado leer. Me faltó algo más de "chispa" en la historia. Aún así, me gusta mucho cómo escribe este autor y lo bien que hila sus historias.

Cuando por casualidad cayó en mis manos el primer libro sobre el detective Dave Gurney (Sé lo que estás pensando) me atrapó para siempre. Ahora acabo de terminar la última entrega, y no me ha decepcionado en absoluto. Para los que no conozcan la saga, Dave Gurney es un exitoso detective de homicidios de Nueva York, que tras retirarse se traslada junto con su mujer a vivir en las montañas Catskills, en plena naturaleza, al norte del estado de Nueva York. Desde el primer momento su mujer se siente feliz con su nuevo estilo de vida, pero a Dave le falta algo, el gusanillo de su profesión no deja de picarle, lo que lo lleva a aceptar colaborar en distintos casos cada vez que alguien requiere su ayuda.En esta ocasión es requerido por un antiguo compañero de homicidios, jefe de policía de Larchfield, un pequeño, rico, y en apariencia idílico pueblo próximo a su casa. Cuando el poderoso millonario Angus Russell aparece asesinado, todas las pruebas apuntan directamente a Billy Tate, un joven problemático, pero hay un problema: un día antes del asesinato de Russell, Billy Tate fue declarado muerto tras caer desde un tejado, lo que convierte el asesinato en un caso altamente complejo.David Gurney es un investigador concienzudo, que se enfrenta a las pruebas con racionalidad, tranquilo y pausado, pero tenaz. Nunca se da por vencido, nunca se conforma con suposiciones, necesita pruebas contundentes, y no cejará en su empeño hasta la resolución final del misterio. Recomendable para los fans de las novelas de misterio, aunque no lo considero un thriller. A pesar de que los giros en la historia de suceden, esta entrega está más centrada al estudio e interpretación de las pruebas, lo cual no significa que no atrape ni te tenga en vilo esperando el desenlace de la historia. A mí me ha atrapado desde la página 1 y me ha tenido despistada hasta el final. Se puede leer independientemente de haber leído o no las novelas anteriores, aunque como suele ocurrir con este tipo de sagas policiacas, siempre es mejor seguir la vida del protagonista en el orden adecuado.