Pablo está convencido de que ha recibido el ataque de un auténtico hombre-lobo. Incluso tiene alguna prueba, pero ni sus padres ni su hermana Sonia lo creen. Pablo sabe que no ha sido un sueño y está dispuesto a demostrárselo a todos. En su empeño, se enfrentará junto con su hermana Sonia con temibles peligros y con algún que otro miedo interior.