Cuando todo parece perdido, a veces, el azar nos concede segundas oportunidades. Pero Ever y Damen saben que su condena no tiene remedio: pasarán la eternidad juntos y sin poder tocarse. Sin embargo, un giro del destino les ofrece una salida... a cambio de un gran sacrificio: Ever debe escoger entre liberar Damen o buscar el Árbol de la Vida, cuyo fruto podría salvar al resto de inmortales.¿Será capaz Ever de sacrificar el destino de cientos de almas por egoísmo? ¿Se arriesgará a perder su amor por un fin superior?
Nos pasamos la vida atrapados en cosas incorrectas, desorientados por nuestra mente y nuestro ego, viéndonos como seres separados unos de otros, en vez de escuchar la verdad que yace en nuestro propio corazón, la verdad que afirma que todos estamos conectados.