"El amor un lunes por la tarde, los músicos del metro, una siesta y un abrazo, las manos y sus uñas, el humo, los columpios, los latidos... Son los gestos y rumbos cotidianos que nos acompañan en silencio, como sombras, marcando el carácter íntimo de este libro. Las desinencias son las partículas finales que aportan significados específicos a los verbos. Aparentemente, son minúsculas, casi, insignificantes en comparación de la palabra a la que acompañan... Nuestra vida también está repleta de Desinencias que apenas apreciamos, de pequeños detalles a los que nunca prestamos atención, y sin embargo, marcan nuestro destino final, nuestro mundo, en definitiva: el amor un lunes por la tarde, los músicos del metro..."