Además de publicar novelas tan inolvidables como Siddbartba o El lobo estepario, Hermann Hesse cultivó durante toda su vida el género del cuento en sus más diversas variantes, y siempre con una agudeza y una sensibilidad a la que es difícil encontrar término de comparación. Cuentos maravillosos reúne una de las vetas exploradas por Hesse en su narrativa breve, la de unos relatos en los que la magia y lo maravilloso, que se revelan como formas de amor, cobran un papel decisivo y nos remiten a la infancia. Pequeñas joyas narrativas que ningún lector atento olvidará.
¡Y la magia llegó! Y llegó al ritmo de la música que expresa Hesse con sus letras, con su imaginación y con su certera puntería que llega directo al corazón del lector. 🏆 Sin duda alguna estos Cuentos Maravillosos son eso: ¡Maravillosos! Son 16 extraordinario cuentos en donde el lector se encontrará en bosques, castillos, ferias, y, ante todo nos encontraremos en esa dimensión en donde todo es posible, la dimensión de los sueños, en donde hoy eres un árbol hombre-mujer, en otro momento eres ser volador, y en ocasiones hasta eres una montaña. Así de maravillosos son los cuentos que nos "cuenta" Hesse en estos 16 espacios en que quedamos con la "boca abierta", en la que cada uno tiene una clara conclusión: hay que reflexionar, hay que pensar, hay que soñar. 🤓 Totalmente recomendada esta extraordinaria obra maestra de Hesse. No se van a arrepentir de leerla. 🥇
Píctor vio un pájaro sentado, lo vio en la hierba posado, y de mil colores pintado; de todos los colores parecía el hermoso pájaro estar dotado.
¿Y acaso no era yo un hombre, un ser ingenuo y efímero con derecho a un poquito de dicha, a un rinconcito de sol, a una vista llena de azul y de flores?
Ella tomó su cesto con la comida; y otra vez sus ojos de sombras pardas se inclinaron sobre mí, y sus labios se adhirieron a los míos. Su beso fue tan bueno y dulce, que casi me puse triste de pura felicidad. Entonces le dije adiós y marché presuroso carretera abajo.
«¿Es la muerte algo tan malo?», preguntó burlonamente, «Oh, no, gran pájaro, no es algo tan malo, la muerte es sólo una despedida. Pero no es por eso que estoy triste. Lo malo es que no podemos enterrar a mi amigo y a mi hermoso caballo, porque ya no tenemos flores para ello».