La segunda entrega de esta terrorífica historia de amor y vampiros. Stefan Salvatore, el principal sospechoso del asesinato del profesor de historia, ha desaparecido. Para probar su inocencia, Elena debe encontrarle, pero antes debe descubrir quién se ha apoderado de su diario.
El desarrollo de esta segunda novela me ha gustado bastante, cada día quiero un poco más a los hermanos Salvatore y me gusta ver el tríangulo amoroso entre los personajes. Claro, este libro se centra principalmente en el amor juvenil pero tiene varios toques de misterio interesantes.
Sinceramente me alegré mucho, cuando lo leí en mi adolescencia, de que ya no hubiese tanto romance ni detalles pedantes en esta entrega. Aun así, sigue siendo libros para adolescentes y eso se nota (por suerte no es Crepúsculo) Se me hizo muy ameno si mal no recuerdo, me encantaba el hermano, Damon, era el más carismático de los salvatore. Si podéis no veis la serie televisiva, es una porquería. Es un libro corto, se puede leer en un día y si se aguanta la pedantería, tiene momentos muy intrigantes... Por fin se empieza a desarrollar un poco mas la trama.
Por mucho que diga la gente recordemos que este es un libro juvenil que en su tiempo se había escrito para chicas adolescentes. Sinceramente este libro me hizo querer aún más a Damon y a soportar más a Elena. Mi problema del libro anterior fue que sólo se centraban en el amor juvenil de Elena, en este se expandieron más y realmente crearon un conflicto en la protagonista sobre con quien quedarse, quien ser. 5 estrellas
Me encanta el personaje de Damon, se está convirtiendo en una buena saga juvenil, con misterio, romance y triángulos amorosos. Me parece que esta segunda parte es mejor que la primera, se va desglosando más el tema principal, y esparciendo las ligas de relación de cada personaje.
Sinceramente, si el primero me abrió expectativas, esta segunda parte las dejó caer.Los personajes y la trama no crecen, van como pollo sin cabeza. No sé si seguir con la saga o no, voy a darle otra oportunidad, porque el personaje de Damon me llama la atención, espero no equivocarme.
Me gustó más que el libro pasado, es muy rápido de leer y aunque Elena me estresa un poco, Damon me encanta, eso sí, cada que leo de él, solo puedo pensar en el Damon de la serie.
En esta segunda entrega de Crónicas Vampíricas de la autora L.J. Smith vemos a una Elena que poco a poco ha venido cayendo en una espiral de desprestigio social, con una compañía bastante complicada al completarse el triángulo entre los dos hermanos vampiros y las inquinas de una Caroline cada vez más empoderada por la ayuda de Tyler Smallwood. A diferencia de la primera entrega, en este libro las acciones son más rápidas, aunque igual de predecibles, especialmente en lo relacionado entre Elena y Stefan, quienes aún conservan una actitud bastante sufrida siendo ésta más representativo en la actitud del italiano, quien tiene un aire de derrota y angustia más presente en el libro. Conoce más de nuestra crítica aquí👉https://bit.ly/3sc2IWy
Aquel tiempo era una exhibición de su poder, destinada a ahuyentarla. No funcionaría. La idea de ese mismo poder vuelto contra Stefan despertaba en su interior una furia abrasadora que ardía en oposición al viento. Si Damon le había hecho algo a Stefan...
Una hoja seca de roble que parecía una marchita manos morena avanzó a saltitos hasta su pie, pero no hubo respuesta.
Estaba justo detrás de ella, tan cerca que sus ropas la rozaron cuando se dio la vuelta. A aquella distancia, debería haber percibido la presencia de otro ser humano allí parado, debería haber notado el calor de su cuerpo o haberle oído. Pero Damon, por supuesto, no era humano.
Eres la chica que lo tiene todo, pero siempre ha habido algo que ha estado fuera de tu alcance, algo que necesitas desesperadamente y no puedes tener. Eso es lo que te estoy ofreciendo. Poder. Vida eterna. Y sensaciones que no has tenido jamás.
-puedo despertar cosas en tu interior que han permanecido dormidas toda tu vida. Eres bastante fuerte para vivir en la oscuridad y enorgullecerte de ello. Puedes convertirte en una reina de las sombras. ¿Por qué no tomas ese poder, Elena? Deja que te ayude a tomarlo.
En cualquier caso, existían muchas diferencias. Elena tenía el mismo pelo dorado y la misma tez cremosa, las mismas facciones delicadas que Katherine, pero ahí finalizaba el parecido.