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Sinopsis de CONFESIONES DE UN JOVEN NOVELISTA
Unas sabrosas reflexiones del gran Umberto Eco sobre el oficio de escribir. Empecemos por el título: ¿por qué Confesiones de un joven novelista si el eximio profesor está a punto de cumplir los ochenta años? Pues porque su estreno como narrador se remonta a 1980 y, por lo tanto, Umberto Eco puede permitirse el lujo de hablar de juventud en estos menesteres y comentar además que le quedan unos cincuenta años de carrera... Así empieza este texto de ensayos, donde Eco cuenta cómo se acercó a la ficción siendo ya un reconocido ensayista, cómo prepara cada una de sus novelas antes de ponerse a escribir, cómo crea sus personajes y la realidad que los rodea. Luego también nos hablará de la buscada ambigüedad en que el escritor se mantiene a veces para que sus lectores se sientan libres de seguir su propio camino en la interpretación de un texto. Y de la ambigüedad pasamos a la definición de los personajes de una novela y a la capacidad de un escritor para manipular las emociones del lector. ¿Por qué en general no lloramos si un amigo nos cuenta que la novia lo ha dejado y en cambio muchos nos emocionamos al leer el episodio de la muerte de Anna Karenina? Como broche final, una reflexión sobre la pasión de Eco por las listas, que explica su peculiar manera de ver el mundo. Todo en este delicioso texto son preguntas que Eco plantea y respuestas ingeniosas que él mismo propone, con ese aire socarrón que lo distingue y convierte cada anécdota en una lección de vida.
3 reseñas sobre el libro CONFESIONES DE UN JOVEN NOVELISTA
Para Umberto Eco cada uno de sus libros han seguido un proceso y tiempos diferentes, en esta entrega nos ofrece las peculiaridades de él como escritor. Podemos tomarlo como un mentor que ofrece una guía, para algunos tal vez solo unos consejos, o como una biografía no de Umberto, sino mas bien de sus libros. Este escritor al que mas admiro, uno de los pocos que maneja el latín y eso por placer, empleándolos constantemente entre sus escritos. Y es que todo tiene una razón, bordeando entre el escritor hace a sus libros o los libros hacen a un escritor. Un libro lleno de respuestas curiosas e impecables que atienden a preguntas curiosas y profundas, todas ellas planteadas por el mismísimo Umberto Eco.
Umberto Eco es un escritor especial, formado en las canteras de la lingüística, de la semiótica, de la filosofía; llegó, como menciona en esta obra, a un punto en que sintió una imperiosa necesidad de escribir, ya no un ensayo, como muchas veces lo a hecho, de alto nivel, erudito, que muy pocos podrían entender y sacar un provecho; si no, una novela. Su primera novela, El nombre de la Rosa, es una obra que se ha ido gestando, como nos hace notar el autor, a través del tiempo; que se nutre de los estudios que realizó de la Estética en la época medieval, de la visita que hizo a muchas abadías románicas, góticas y, que como él refiere aguardaban en un ropero, ser sacudidas y volverlas a la vida; El nombre de la Rosa tomó vida de esta manera, lo otro fue que, durante dos años, se dedicó a armar la historia, de tipo detectivesca, crear la intriga, el misterio y forjar al personaje original, un monje, Franciscano, que mediante el uso de la razón vaya descubriendo los crímenes que se estaban produciendo en una Abadía de monjes Benedictinos, que relacion vincula a los asesinatos y, quien o quienes son los asesinos...la historia está ambientada en un convento-Abadía Benedictina de los años 1300, dió con buen pie el inicio de esta novela. Como era de esperar...un manuscrito.... En ésta obra, Confesiones de un joven novelista, Umberto Eco hace gala de un humor erudito, y resume su método de elaboración de una novela en función a lo que uno más conoce, ha estudiado, ha leído, ha vivido y visitado; describe como hizo con sus otras novelas, el péndulo de Foucault, Baudolino, y las demás. Dentro de las pautas está el orden y la secuencia a la que puede adicionarse episodios, capítulos y la obra va tomando cuerpo. Como dice y es un dicho conocido: la creación, es noventa por ciento esfuerzo y diez por ciento inspiración. Así que el esfuerzo lleva la mayor parte de la labor creativa...a veces la inspiración, llega o nunca llega...a tiempo. Muy recomendable y aleccionadora.
