Sinopsis de CONACHO

Servando Bacelo miró la fachada de la casa y tuvo la sensación de que se había parado el tiempo, que podían estar en mil novecientos veinte y que él era su abuelo. Tenía la sensación de que el destino repetía una y otra vez la misma escena; dentro de cien años, pensó, alguien estará mirando como yo el ultramarinos y tendrá detrás la estatua del Marqués cagada por las palomas y también se preguntará por qué no cambia nada en la ciudad y por qué los que la habitan se parecen tanto a los que la habitaron. En el dos mil también habrá un Santalla que ponga su bota encima del alma de la ciudad y que no la deje respirar, y la muralla seguirá dividiendo los dos mundos, las dos vidas que se miran sin encontrarse, soñándose la una a la otra como si no existieran, y alguien como él ahora pensará que el tiempo se ha parado y que la ciudad ha sido condenada a no ver nunca el mar, porque el mar es un secreto indescifrable." Es una novela que transcurre en Ferrol, con personajes y situaciones bien conocidas en la ciudad, pero no es una novela costumbrista ni localista. Su planteamiento y su contenido son más ambiciosos y consiguen que la novela trascienda el anecdotario local. Centrada en unos días del mes de marzo de 1964 . Estamos en plena campaña franquista de los Veinticinco años de paz la novela recrea aquellos tiempos grises, poco fiables y enrarecidos por sospechas de fidelidad política, ambiciones desmedidas y ajustes de cuentas personales. Fernando Bacelo, el protagonista de la historia, es una víctima de las circunstancias políticas del momento, acentuadas, eso sí, por el complicado entramado social de la ciudad. En un solo día su vida sufrió un cambio radical y nefasto, como la de un personaje kafkiano, quizá sólo explicable por vivir en una ciudad ensimismada, adormecida entre el poder de la Marina y la hegemonía laboral de La Constructora.

0 reseñas sobre el libro CONACHO