Raras veces se produce en el campo del drama un gran descubrimiento: una revelación. Esta lo es. Su autor se sitúa de pronto en el nivel de los grandes autores europeos de este tiempo, y desde esta editorial su aparición es saludada con gozo y esperanza. Un alto nivel poético, un alto nivel ideológico: Una cultura y una sensibilidad nada comunes. Aleluia. Sólo buenas noticias poéticas puede anunciarnos esta publicación.