Los dos libros que leí de este autor el año pasado fueron de las mejores lecturas del año, así que en cuanto conseguí tener esto entre mis manos, no lo dudé. Pero… ¡gran decepción! Aunque nos encontramos con los mismos personajes de la primera parte y continúa temporalmente desde dónde quedó ésta, me ha parecido un libro sin sentido, como si las buenas ideas que tan graciosas me resultaron se le hubieran acabado y hubiese tenido que tirar de chiste fácil. Es un montón de cosas absurdas, no me extraña nada que esta segunda parte sea menos conocida. Aunque este escritor me encanta y seguiré leyendo más libros suyos seguramente, sé que me quedan joyas por descubrir. Pero aunque es una pena, este libro no lo recomiendo.
La secuela de Charlie y la fábrica de chocolate. Es un libro de relleno. Dos situaciones en concreto suceden, Cuando Charlie, Wonka, sus padres y abuelos suben por el ascensor, por partes sentí ese vértigo de subir en un panorámico a toda velocidad hacia el infinito. Los seres del exterior me causaron mucho terror. La segunda situación es su visita a la fábrica y todo lo que pasa son el Vita-Wonka y resta y suma. También deja ver al igual que el anterior la #ambición . Libro bastante Regular