CAMBIO DE PIEL

De Carlos Fuentes leí Vlad, una historia de suspense que me fascinó. Inocente de mí, decidí continuar leyéndolo y me tiré a la piscina con uno del mismo género, pero de más de 400 páginas... Lo compré en físico y cuando comencé a leer... ¿esto qué es? ¿qué me estás contando? ¡qué lío! ¿qué se fumó este hombre? Desconcertada, me acordé de Aura, un relato muy alabado por aquí del mismo autor. Hice parón y lo leí. Vale, muy bien: cuatro estrellas. Entonces, ¿qué demonios es Cambio de piel? Esta novela me recuerda al Ulises de Joyce. Al igual que el Ulises, aparecen unos protagonistas repelentes, no empatizas con ninguno, te caen mal por sus formas de ser, sus actos y sus pensamientos. Y como el Ulises, toda la novela transcurre en un solo día. En sus más de 400 páginas contadas en segunda persona (me parece una perspectiva narrativa muy cansina, la verdad) el escritor se dedica a contarnos lo que piensan, recuerdan y hacen los cuatro protagonistas. Isabel casada con Franz y Javier casado con Elisabeth son amigos, que van de vacaciones a Cholula (México) a disfrutar de la arquitectura azteca. Franz es arquitecto y es el orgulloso diseñador de uno de los mayores campos de exterminio de la Alemania nazi. Isabel es estudiante. Javier es su profesor de la Universidad, quiere ser escritor pero es un fracasado y culpa a su esposa Elizabeth. Isabel y Javier son amantes. De todo esto te vas enterando a salto de mata, rebuscando entre páginas y más páginas sin puntos, mezclando idiomas, expresiones en inglés, francés, alemán ... mezclando los pensamientos y recuerdos de uno y otro personaje, todo aderezado con continuos saltos en el tiempo. No hay un solo capítulo en todo el libro. Es un bloque compacto. No se si entendí el desenlace (ni siquiera la introducción o el nudo, me he sentido como en una barca a la deriva, con un mareo constante) Creo que ha sido bastante surrealista,. Si alguien lo ha leído me encantaría comentarlo. A los que tenéis en mente leerlo, buscaros una buena guía o algo( un valium serviría) Aprecio el tiempo dedicado, la ilusión y el trabajo que cada escritor pone en sus obras, por eso le pongo 2 estrellas y media, pero con esta novela mi curiosidad sobre la escritura de Carlos Fuentes ha quedado más que satisfecha.

RESUMEN: El Domingo de Ramos de 1965 cuatro personajes inician un viaje hacia Veracruz y se detienen en Cholula, ciudad de las pirámides aztecas. En el laberinto de sus galerías se internarán las dos parejas, como en un descenso a los infiernos, que concluirá con una tragedia ritual inesperada. Ficción total en palabras del propio autor, Cambio de piel indaga en el mito del México prehispánico y en el holocausto europeo a través de la memoria de sus protagonistas para decirnos que, en definitiva, todas las violencias son la misma violencia.OPINIÓN: Qué libro tan difícil, no digo que sea malo, solo que es muy complejo, los cambios de tiempo, los personajes que cambian de un renglón al otro y nunca identifique un clímax. Quizá sea un libro para conocedores y se me quedó algo grande, quizá.

Novela complicadísima de leer: necesita lápiz y papel. Libro multitemático: México en el contexto mundial, el holocausto judío, la intolerancia, el sexo y el amor, entre otros, en ríos de pensamiento. Una novela básicamente dialógica y joyceana que tiene larguísimos párrafos que hay que leer con muchísima atención. Cambio de piel ganó el premio Biblioteca Breve en mismo año de su publicación (1967) y fue prohibida su difusión en la España franquista, que la catalogó como: "una obra pornográfica, antirreligiosa, comunistoide, projudía y antialemana". Las páginas más conmovedoras y desgarradoras son las referidas a los campos de concentración nazi y el espanto que vivieron los prisioneros no solo judíos, sino también los prisioneros políticos. Son páginas que hacen derramar lágrimas. El arranque de la novela es muy interesante y prometedor: la conquista de México por Hernán Cortés, pero todo ello se pierde en enormes discursos filosóficos y existenciales que para un lector de gama media resulta asfixiante y agotador.

Insufrible. Verborrea que fue alabada por críticos snob de los sesenta, cuando era boom cualquier cosa rara.