La disputa de Jean-Paul Sartre (1905-1980) a lo largo de toda su obra filosófica con el carácter reduccionista y simplificador de los enfoques científicos en el estudio del hombre comenzó con este temprano Bosquejo de una teoría de las emociones, dedicado a mostrar las insuficiencias y contradicciones de las teorías psicoanalíticas y a criticar las escuelas psicológicas que se limitan al estudio de los hechos suministrados por la percepción espacio-temporal y por la experiencia introspectiva. Según concluye Sartre en esta obra, la psicología debe partir del carácter significativo de lo psíquico como aspecto diferenciado de la totalidad humana y buscar su fundamento en una antropología fenomenológica.
Es un ensayo de treinta y dos páginas.En él,Sartre reflexiona sobre el estudio de las emociones,antropológicamente y psicológicamente,del ser en el mundo.Para Sartre,el error de los psicólogos lo cometen cuando,por ejemplo,estan trabajando con un enfermo,el no empezar por el principio,para ello,debemos empezar el estudio por la antropologia del hombre,ya que de esta forma dejan a un lado las emociones y la propia conciencia,pero en definitiva,para el Nobel francés,el hombre,aparte de muchas otras cosas,es responsable de su vida,de lo que es,para él,y para sí en el mundo.