BLACKMOORE

Este libro lo escogí en un momento que lamentablemente no era el indicado. Lo empecé a leer con muchas ganas, aunque no iba con las expectativas altas, simplemente había leído antes el de Edenbrooke y fue un libro que me encantó, por lo que éste al ser de la misma autora creía que me gustaría igual. Aquí conocemos a Kate una chica que siente que toda su vida ha estado en una jaula de oro. Ella sólo quiere dos cosas conocer Blackmoore, la casa donde Henry y Sylvia, sus dos mejores amigos, pasan todos los veranos y viajar a la India con su tía Charlotte, para así poder alejarse de la situación asfixiante que vive con su madre y hermanas. Cuando por fin está a punto de cumplir uno de sus sueños, viajar a Blackmoore, se siente feliz, pero eso cambia cuando su madre le prohíbe ir. Para poder salir de ahí Kate hace un trato con su madre y le dice que conseguirá que le hagan tres proposiciones de matrimonio que ella rechazará durante su estancia allí, si lo consigue su madre le permitirá ir a la India, pero si no, el costo será demasiado grande y quedará a merced de su madre para hacer todo lo que le diga. La primera parte se me hizo muy pesada, no empatizaba para nada con la protagonista, incluso llegó a disgustarme en algunas situaciones. Ahora que lo pienso siempre que leo novelas de época debo recordarme que la mentalidad que había en esos años dista mucho de lo que vivimos ahora y que había muchas presiones sociales a las que se veían sometidas las mujeres más que nada, aunque también los hombres se veían involucrados en matrimonios por conveniencia. Las familias de ambos son de lo peor, no hay duda de que sólo manipulaban las cosas en beneficio propio, un rasgo que era bastante característico de esa época, donde el status era de lo más importante y en el caso de las mujeres mantenerse alejadas de los rumores o de escándalos que pudieran manchar su reputación. En el siglo que vivimos ahora algunas de las cosas por las que sufre Kate pueden parecer ridículas pero en ese tiempo la mentalidad era otra y de verdad las mujeres sufrían por eso. Lo que si me sorprendió, y no tanto para bien, era la razón por la que ella había renunciado al matrimonio, creía que sería algo más personal, por no seguir lo convencional pero no. De lo que rescato es la pluma de la autora tiene una forma muy bonita de transmitir los sentimientos y de ambientar las historias, en los momentos más románticos podía sentirme en esa torre con vista al cielo lleno estrellas. Los paisajes, aunque no se demora mucho en hacer descripciones logra transportarte a ese lugar, haciendo que desee encontrarme ahí. También destaco mucho la manera en que construye a los personajes masculinos, tanto en este libro como en el de Edenbrooke quedé completamente enamorada de ellos. Henry fue un gran personaje es todo un caballero, encantador, amable y sobre todo respetaba a Kate en todo lo que decidía, nunca la presionó para abandonar sus sueños ni intento hacer que cambiara su forma de ser. Por eso me dolió un poco ciertas formas que tuvo Kate de hacer las cosas con él, sé que lo que sabía y por lo que se alejaba era difícil pero aun así debemos darle la oportunidad a la otra persona de que elija no podemos tomar decisiones por uno mismo si afectan a la otra persona. Hubo varios capítulos flashback donde muestran porque Kate cambió tanto, lo que me permitió entenderla un poco mejor. El final se me hizo un poco rápido y hubiera deseado leer un epílogo más largo. Al final el libro me gustó, a pesar de las dificultades del principio, en las últimas cien páginas no lo podía soltar porque estuvieron llenas de revelaciones dolorosas, encuentros comprometedores y declaraciones de amor muy intensas. Es un libro bien escrito, romántico con bastante drama como me gustan. Tal vez más adelante podría hacer una relectura y disfrutarlo mejor. Aunque de éste al de Edenbrooke me sigo quedando con Philip y Marianne.

Una historia romántica de tira y afloja entre nuestros dos protagonistas. Familias enfrentadas, secretos y sueños que cumplir. La única pega que le pongo es el epilogo, no revela lo que ocurre con los personajes, simplemente deja caer algo relacionado con los protagonistas.

Me ha gustado tanto, por ha sabido llegar a mi corazón. He empatizado mucho con los personajes principales. Me ha encantado la manera de escribir de esta autora, simple y sin darle demasiado rollo a algo tan sencillo. La libertad que buscamos cada uno, la que podemos conseguir que depende de nosotros mismos.

Una historia que te demuestra que puedes decirle al corazón que no ame y llore por nadie, pero como siempre, él es tan rebelde como el que más y es libre de elegir a quién quiera aunque te niegues a reconocerlo o a sacrificarlo por algo que crees es lo mejor.

E buna

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