BAJO LA RED

Comenzar una novela es como abrir la puerta a un paisaje neblinoso ; ves muy poco, pero hueles la tierra y sientes el soplo del viento. Así lo describe Iris Murdoch...con referencia a la novela ..."Bajo la red"...yo incluso diría...Comenzar una novela es como empezar de nuevo... incluso con lo viejo...tienes una vida por delante...y mil historias por detrás...hueles a tierra...es verdad... pero a tierra mojada...tierra preñada de vida y naturaleza. La historia nos pone en el papel de Jack Donaghue...escritor de poesías y traductor en horas bajas. Su chica le comunica que se ha enamorado de otro...en ese punto comienza la búsqueda y conocimiento propio de nuestro protagonista. Conocerá y también descubrirá a nuevos y antiguos amig@s que le ayudarán en su crecimiento personal. Con un sentido del humor brutal nos sumergimos en una historia colosal. Cada lector llegará a distintas reflexiones e interpretaciónes...para mí las más importantes quedan reflejadas en estas frases... "Solo podemos aprender a amar... amando". "Entre el decir y el hacer... muchos pares de zapatos son desgastados". "Cualquier cosa que dé consuelo es falsa". Una novela llena de palabras mágicas...de frases seductoras..de historias que realmente cuentan algo. Un sentido del humor muy British...muy de mi gusto... realmente pienso que el libro es una invitación a conocernos y aceptarnos sin falsas florituras...sin adornos inútiles. Las relaciones humanas siempre estarán de moda...es la pasarela eterna...es el diseñador total...el vestido perfecto. Si quieres vestirte de temporada te recomiendo ir a una tienda de moda...si quieres sentirte único con la ropa elegida...prueba el traje que nos propone Iris Murdoch...un traje más liviano de lo que puedas sospechar. Señoras y señores pasen y lean.

BAJO LA RED Conocer personas podría decirse que es una ley natural, hace parte del proceso evolutivo del ser humano. No importa cuánto quiera alguien evitar relacionarse con su prójimo. Posiblemente esté dado por la necesidad de comunicación o simplemente por algo nativo en nuestros genes impulsando el vínculo entre especie. Es verdad que algunas personas pasan sin siquiera despertar un ápice de interés, bien por carecer de aquello que buscamos o esperamos, o sencillamente porque las fuerzas universales que unen, crean vínculos. Llamemos lo aura, energía, destino. No se fusionan, se repelen como cargas de igual signo. Ahora bien, llega una oportunidad a veces se repite, aunque por obvias razones no será igual, hallas a alguien con quien haces click. Pocas palabras bastan para crear un vínculo, una relación de singular particularidad. Los motivos de esa atracción son variados. Gustos en común, pensamientos similares, quizás sea la parte inexplicable la que te acerca más a alguien, la búsqueda del por qué. Cuándo digo relación hablo de cualquier tipo que puedan existir. Así, Jake conoce a Hugo o se conocen. De inmediato el primero queda impresionado por el segundo. Por su forma de entender el mundo y por darse cuenta que tal vez no entienda nada. Tanto es el impacto de su personalidad que Jake, un escritor y traductor, escribe un libro contando las conversaciones que mantiene con Hugo. El Silenciador, se llama la obra. Los temas que tratan son muchos y claro, los de mayor interés para el ser humano. Sobre todo de si existe la verdad o todo es falsedad. Bajo la Red, obra con altos y bajos, más altos, pocos bajos. Y estos vienen dado por la introducción de descripciones y soliloquios de Jake quien cuenta la historia que pueden desgastar y reducir el tiempo destinado a la lectura. Puntos altos, el estilo, la forma de crear interés por la lectura con temas sencillos, del cotidiano vivir. Vivimos bajo una red de la que intentamos escapar, de la que tiramos nosotros mismo y otros son las que la tienden o la mano propia arroja sobre si mismo para estar prisionero, tal vez para escapar de algo. No obstante la corriente que arrastra el devenir de las cosas sin duda nos llevará donde debemos ir.