En las montañas de la isla indonesia de Célebes vive el pueblo de los toraya, conocido por unos ritos funerarios que se prolongan durante varios días y congregan a toda la comunidad. Cuando un bebé muere, por ejemplo, su cuerpo se deposita en el interior del tronco de un árbol centenario que, poco a poco, lo envuelve y se nutre de él. Así, al crecer, el árbol conduce a los niños hacia el cielo, un símbolo escultórico mediante el cual se mantienen próximos los seres amados que ya no están. El narrador de esta historia, un cineasta profundamente afectado por el fallecimiento de Eugène, su mejor amigo y confidente, descubre en los árboles de los toraya la síntesis del misterio de la vida y la muerte, como una llave maestra capaz de abrir ese recinto hermético en el que las personas escondemos las vivencias más íntimas. Asomándose al abismo de la pérdida, el narrador se encuentra, paradójicamente, cara a cara con la intensidad del amor, ese enigma insondable que nos liga al futuro mientras el presente desgarra nuestro ser.Reconocida y celebrada en sus obras más emblemáticas Almas grises, La nieta del señor Linh y El informe de Brodeck, la prosa depurada, poética y luminosa de Philippe Claudel brilla aún más en este texto intimista, de gran hondura filosófica, que es a la vez un homenaje a la amistad y una oda a la...
Esta novela aborda la muerte de un ser querido, y en este caso, el mejor amigo del narrador. Aunque de a poco va incluyendo a otros seres queridos que ya no están. También nos habla del amor y la ruptura de de la pareja, de su profesión como cineasta, así como la pasión que tiene por la literatura. Es un libro que no tiene una sincronización. Va y vuelve del presente al pasado, pero nunca pierdes el hilo. La novela tiene muy bellos pasajes, y cada frase, cada párrafo está muy bien escrito. Es un libro fácil de leer. Pero sin ser un libro extenso (173 páginas), a ratos tenía ganas de terminarlo. Y no porque el tema pudiera afectarme o no, sino porque a veces las reflexiones del narrador me han parecido simples y diría que hasta no demasiado realistas. A pesar de todo, y valga mi controversia, es interesante observar la visión que tiene el narrador en esos duros momentos y como mezcla la muerte y el amor casi en el mismo saco.
Bajo el árbol de los toraya es un libro que reflexiona sobre la muerte. El autor compara la visión de ella aquí y en Indonesia donde la ven de un modo distinto a aquí. Es un libro muy bien escrito. Empieza contando varias experiencias que ha vivido con la muerte desde personas cercanas, una muerte por cáncer, pasando por la muerte de otras personas no tan cercanas e incluso la muerte de un matrimonio. La única pega que le puedo ver al libro es que al final el escritor se anda un poco por las ramas, divaga bastante. Pero aún así es una reflexión y crítica a la vez de la muerte.
Me pregunto qué sería del mundo si los seres humanos se vieran reducidos a su voz, si de pronto todos los cuerpos desaparecieran y solo quedaran las voces. ¿Seríamos mejores?
En el siglo XX, del que procedo, las civilizaciones empeñaron sus esfuerzos en dos empresas fundamentales y contradictorias: la búsqueda de instrumentos de exterminio cada vez más eficaces y la mejora de las condiciones de vida y de preservación de la especie humana."